Malvinas 31 Años ganas de fumar pero, como ve, no tengo demasiados bolsillos donde ponerlos— le dio una larga pitada y me lo agradeció. Me despedí de el con una afectuosa palmada de aprobación y merecida felicitación por la tarea realizada. Aún se combatía en la ciudad y desde el aeropuerto escuchábamos claramente un nutrido intercambio de disparos de armas automáticas. La Patria estaba cosechando un nuevo héroe contemporáneo: el capitán de corbeta Pedro Giachino. No sé si motivado por la lucha, o por mis ganas de colaborar en algo o con alguien, vi que el general y el coronel descendían del avión cargados con sus portafolios y sendas bolsas de equipo de gran tamaño; me acerqué y me ofrecí a llevárselas hasta el vehículo que habíamos traído. Aceptaron pero no me dijeron ni gracias, lo que-siendo sincero— me emboló; casi habíamos llegado cuando vi al coronel ensuciarse las manos con tierra y pasárselas por la cara y el uniforme; terminé de saturarme al escucharlo aconsejarle al general hacer lo propio— « Mi general, aún combaten y no podemos llegar limpios al pueblo ». Antes de que terminara de calentarme— e hiciera algo de lo que me arrepentiría por largo tiempo— me les adelanté y parándome frente a ellos para que vieran mis « tiras » en la campera de vuelo, dejé caer las
Interdefensa Militar Argentina
Historias de Malvinas bolsas. Sin saludarlos ni pronunciar palabra, di media vuelta y me alejé. Supongo que por vergüenza, no me llamaron. Cuando aterrizamos de regreso en Comodoro, apareció en poder de uno de los tripulantes la bandera que habitualmente se izaba en el Aeropuerto. La tripulación se sacó una foto con ella al pie del TC-68, nuestro avión. Creo que fue el jefe de Grupo quien protestó y nos recriminó diciendo que no era un trofeo de guerra, cosa muy cierta, pero el responsable le aclaró que la había traído como recuerdo de la patriada. No sé si en ese momento o tiempo después se hizo cargo de ella el comodoro Roberto Federico Mela, único tripulante, según creo, que efectuó el primer vuelo de C-130 del dos de abril y el último en la noche del 13 al 14 de junio.( Nota: El Comodoro R. F. Mela y el Sub. Of. Roberto Carabajal, fueron los únicos tripulantes que participaron del primer aterrizaje y del ultimo despegue de Malvinas) En esa misma condición de recordación fue traída el mismo día otra bandera, también sacada de un cajón del mostrador del aeropuerto, que pensé que era la que se encontraba en la secretaría de la jefatura del G1TA, los dos años en que me desempeñé como jefe de Escuadrón. El brigadier Jorge Francisco Martínez,
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