Entrevista con
daniel goleman
E - Han transcurrido más de catorce años desde que usted escribió su bestseller Inteligencia Emocional, el cual introdujo al mundo a este concepto revolucionario. ¿Por qué cree usted que el tema de la Inteligencia Emocional sigue siendo tan atrayente hoy como cuando el libro fue publicado?
Daniel Goleman: En ese entonces la idea resonó con las personas por que esta hace sentido inmediato cuando usted se detiene a pensar en ella. Lo que yo le agregué fue la base científica para hacer esa distinción. De igual forma el término “CE” (coeficiente emocional, o “EQ” por las siglas en inglés de “Emotional Quotient”), se ha convertido en un fenómeno, porque el momento en que éste surgió era el correcto.
E – Algunas personas reaccionan agresivamente cuando están bajo presión o bajo un ataque aparente. ¿Podríamos decir que ser emocionalmente inteligente es tener la habilidad de controlar las reacciones impulsivas rápidas?
Daniel Goleman: Eso es correcto. El “cerebro emocional” responde a un evento mucho más rápidamente que el “cerebro pensante”. Si percibe una emergencia emocional, puede tomar control de todo el resto del cerebro antes que el neo-cortex (el cerebro pensante) haya tenido tiempo de analizar las señales entrantes y decida qué hacer.
E– Usted también es el pionero en el tópico de inteligencia social. ¿Qué es exactamente la inteligencia social?
Daniel Goleman: La inteligencia social trata sobre ser inteligente acerca de las relaciones, es la parte interpersonal de la inteligencia. Significa percibir lo que la otra persona está sintiendo, entender su punto de vista y la facilidad en tener interacciones llanas y efectivas.
E – ¿Cómo se aplica esto en un entorno de trabajo?
Daniel Goleman: Un entorno de trabajo que es socialmente tóxico es también un gran daño a la efectividad. Los líderes socialmente inteligentes reconocen que parte de su compromiso es ayudar a los demás a ser lo mejor de ellos mismos, que no es más que estén motivados, entusiastas e interesados.