Informe sobre antisemitismo en la Argentina 2015
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mensajes oprobiosos. Preocupados por el impacto económico y su imagen pública, varias estrellas han cancelado sus visitas a Israel. Entre ellas,
Jon Bon Jovi, Carlos Santana, The Pixies, Gorillaz, Pete Seeger, Vanessa
Paradis, Elvis Costello y Roger Waters; estos dos últimos han dado un
paso más y se han alistado al BDS. Entre quienes no han cedido a las presiones y dieron conciertos en Israel en años recientes se encuentran, Elton
John, Bob Dylan, Alicia Keys, Maddona, Rod Stewart, Rihanna, Lady
Gaga, Paul Simon, Justin Bieber, Leonard Cohen, Diana Krall, Red Hot
Chilli Peppers, Aerosmith, The Pet Shop Boys y Paul McCartney, quien
había sido amenazado de muerte si pisaba Israel por el clérigo islamista
sirio Omar Bakri. Militantes BDS suelen sitiarse a la entrada de salas de
conciertos donde se presentarán israelíes y elevan pancartas antiisraelíes
y pro-palestinas. En la Argentina se vio ello en ocasión de las visitas de la
Orquesta Filarmónica de Israel en el Teatro Colón en 2013 y de la cantante
Ajinoam Nini en el Teatro Coliseo en 2015.
Fuentes de financiamiento
Además de patrocinadores non-sanctos, llamativamente, BDS es financiado en parte por fundaciones, caridades religiosas y hasta gobiernos occidentales. La Unión Europea es el más grande patrocinador de
ONGs activas en el conflicto palestino-israelí, lo que incluye a las más
radicales entre ellas. La UE transfiere anualmente millones de euros
a grupos pro-BDS aun cuando ello contradiga la política exterior del
bloque, que está a favor de la existencia de Israel y de una solución pacífica entre las partes. Aunque se pronuncia contraria al boicot, el año
pasado la UE decidió etiquetar aquellos productos israelíes fabricados
en los Altos del Golán, Cisjordania y Jerusalem Oriental, lo que dio un
gran espaldarazo al movimiento BDS global.
Por momentos, la política europea parece sabotearse a sí misma.
El año pasado se realizó en España un encuentro internacional de reggae denominado Rototom Sunsplash. Es un festival anual de arte y
música que reúne a referentes del reggae bajo una propuesta de “paz,
igualdad, derechos humanos y justicia social”. El evento contaba con
invitados de setenta y tres países de los cinco continentes. No participaban israelíes pero sí un judío: el músico estadounidense, Matthew