CHELITO HA ESTADO INVOLUCRADO EN LA MUSICA...
desde que tiene uso de razón, él vivía manifestando constantemente su pasión por ella, a la edad de 4 años recibió del niño Dios guitarra, marimba, maraca, tamborcito, nunca hubo un carrito, muñeco o avión que lo deslumbrara tanto como lo hacían los instrumentos, desde muy pequeño su vida giraba en torno a los sonidos, a la percusión, las cuerdas, los acordes y demás resonancias que llegaban a su oído. A los 8 años de edad, su padre, Don Chelo, le regala a cada uno de sus hijos un instrumento, al menor de ellos le correspondió un acordeón, pero a través del tiempo se apodero del de los hermanos, de allí en adelante se desato esa pasión que hasta el día de hoy no termina, vivir y respirar por lo que ama, “Yo tengo la fortuna de vivir de lo que más me gusta hacer, cosa que no tiene todo el mundo, eso me ha servido de pretexto para no trabajar nunca, siento que siempre estoy gozando, la única forma que yo sienta que estoy trabajando es que estoy viajando, esos roletazos que le toca a uno por carretera, pero tocando es pura gozadera.”.