El teniente coronel Fabián Von Schlabrendorff dice: " una campaña en el este se divisaba en el horizonte; estábamos decididos a hacer cualquier cosa que estuviera en nuestro poder para derribar a Hitler y a su régimen”.
En el estado Mayor del Mariscal Von Bock, comandante de los cinco ejércitos que iban a atacar en al sector central de la URSS, había un grupo muy activo de infiltrados, o sean: el propio el propio jefe de estado Mayor, coronel Henning Von Tresckow; el teniente Fabián Von Schlabrendorff; el coronel Schtze-Burger, y los ayudantes del mariscal condes Lehndorf-Steinort y Hadenberg-Neuhardenberg. Todos trataban de influir en el mariscal Von Bock pare enfrentarlo a Hitler, pero el mariscal se mostró indignado diciendo: " No puedo admitir tal tema y defenderé a! Führer contra cualquiera que se atreva e atacarlo ".
Pero Von Bock no se daba cuenta cabal de quién era su jefe de Estado Mayor, coronel Von Tresckow, que bajo su uniforme alemán ocultaba el temor de que la URSS fuera derrotada. Así lo ha revelado su compañero y cómplice Schlabrendorff, al escribir: " Uno de los temores de Tresckow era que los rusos luchasen tan pobremente como los franceses lo habían hecho en 1940 " �Y agrega: '' Junto con el general Stieff, Tresckow logró también la cooperación de los generales Erich Fellgiebel, jefe de Comunicaciones del Alto Mando, del general Eduard Wagner, intendente General, y de Fritz Lindemann, Jefe de Municionamiento.”
La penetración había llegado a los centros más delicados del ejército.
Hitler dijo a los comandantes de ejército que " la ideología soviética esta en los antípodas de la que rige al nacionalsocialismo”, que los comisarios del ejército rojo no eran militares, sino agentes del partido comunista para mantener la dominación roja en Rusia, y que por lo tanto no debería tratárseles como militares, sino como terroristas. Por eso acababa de redactar una " Orden Sobre los Comisarios”, que estipulaba: " En la lucha contra el bolchevismo no cabe esperar que el enemigo someta su conducta a los principios humanitarios o al Derecho internacional. Y sobre todo, es de temer que el comisario político, portavoz de la resistencia, reserve a nuestros prisioneros, dominado por el odio, un trato cruel e inhumano " � Los comisarios políticos son inventores de métodos de combate asiáticos y bárbaros. Por eso hay que actuar sin demora contra ellos y tratarlos con todo rigor. Se ha de proceder a su eliminación sistemática, siempre que se les sorprenda en combate o en un acto de resistencia ".
104