INFILTRACIÓN MUNDIAL PDF - NUEVA EDICIÓN MEJORADA Infiltración Mundial PDF actualizado | Page 133

INFILTRACIÓN MUNDIAL alemanes podían subsistir en presencia de los superpesados tanques soviéticos únicamente gracias e su velocidad v facilidad de maniobra. Echando mano de todas las posibilidades y valiéndose, ante todo, de su mayor disciplina de fuego y comunicaciones radiofónicas, las compañías de tanques lograron que el enemigo se viera obligado a retirarse tres kilómetros. En ese sector habían aparecido los tanques Klim-Voroshilov, modelo KW-1, de 43 toneladas, y el KW-2, de 52 toneladas. Tenían cañones de 8 y 12 centímetros de diámetro, más cuatro ametralladoras. En otro punto (cerca de Dubysa) se entabló un duelo entre la 41º División alemana blindada, con 125 tanques, y la 3ª División soviética con 400, la mayoría de tipo superpesado. Después de dos días de lucha, de repliegues y avances, enlazaron las divisiones alemanas 41º y 6ª, y mediante tiros de precisión sobre las cadenas, o mediante cargas explosivas lanzadas desde muy cerca, los tanques soviéticos fueron diezmados y pudo continuar el avance alemán. Los tanques soviéticos eran superiores en número y coraza, pero no tenían mucha coordinación entre sí y por lo general sólo trataban de avanzar a cañonazos, sin maniobrar. Su comandante era a la vez el artillero y no podía formarse una idea cabal del conjunto. En cambio, las divisiones blindadas alemanas tenían una constante intercomunicación y un comandante (en cada tanque) que coordinaba los movimientos. A veces una sección daba la cara al enemigo, en tanto que otra procuraba flanquearlo. Es decir, desarrollaba una continua guerra de movimientos. El artillero únicamente atendía su cañón. En esa lucha de movimientos las divisiones blindadas o motorizadas alemanas abrían brechas y continuaban adelante, hacia la más lejana retaguardia del enemigo. En ocasiones esas brechas se mantenían abiertas con débiles fuerzas, mientras llegaba la infantería alemana, pero entonces contraatacaban los soviéticos. Había zonas que cambiaban varias veces de mano. La línea del frente era irregular, dentada en algunos sectores, y el servicio de enlace y transmisiones tenía mucho trabajo para determinarla. A fin de evitar errores funestos los alemanes lanzaban luces de bengala, que tenían diversos significados: Bengala blanca: aquí estamos. Bengala roja: el enemigo ataca. Bengala verde: fuego de artillería demasiado largo. Bengala azul: tanques enemigos a la vista. Había contraseñas convencionales para indicar que tales bengalas eran propias. 133