IDENTIDADES 1 ESPAÑOL IDENTIDADES 8 ESPAÑOL | Page 28
Emergencia de una
conversación aplazada
Marthadela Tamayo González
Proyecto Nuevo País
Antilla, Holguín, Cuba
S
e ha avanzado mucho desde la Conferencia Mundial contra el Racismo, la
Discriminación Racial, la Xenofobia y
las Formas Conexas de Intolerancia (Durban,
Sudáfrica, 2001). Muchos Estados han promulgado nuevas leyes y establecido nuevas
instituciones para la promoción y la protección de los derechos humanos, mientras las
organizaciones de la sociedad civil que trabajan para combatir el racismo son cada vez más
activas y visibles. Sin embargo, hay muchísimas asignaturas pendientes aún. Este fue el
mensaje del Secretario General de Naciones
Unidas, Ban Kim Moon, en el Día Internacional para le Eliminación de la Discriminación
Racial, que Juan Antonio Madrazo Luna,
Coordinador Nacional del Comité Ciudadano
por la Integración Racial (CIR), leyó en sede
el 24 de marzo del 2016 para dar inicio a la
jornada de reflexión ciudadana contra la
discriminación. Se presentaron diversas ponencias: La experiencia en talleres sobre
afrodescendencia en Colombia y derechos
humanos, por Luis Oleydis Machado (CIR);
Derechos humanos y sociedad civil, por el
periodista independiente Boris González
Arenas; #Otro 18: inclusión de las minorías,
por Manuel Cuesta Morúa. También se presentaron el séptimo número de la revista
Identidades y el libro Una nación para todos:
Raza y desigualdad en Cuba, de Alejandro de
la Fuente. Madrazo Luna explicó los retos del
proyecto social del CIR, sobre todo empoderar y educar a nuestras comunidades desde la
gestión del conocimiento. Hizo alusión a la
importancia de la visita del Presidente Barack
Obama para Cuba para la identidad cultural y
la integración racial en Cuba, ya que Obama
simboliza, pese al racismo realmente existente
en EE. UU., las tendencias modernizadoras e
integradoras que imponen la decencia en el
campo de la política y envían el vigoroso
mensaje de que definitivamente todos somos
iguales. Es un símbolo cultural, más allá del
significado inmediato, tanto político como
histórico, que nos dice que los Otros pueden
dejar de ser exóticos subordinados Todavía no
es así en Cuba, a pesar de ser un laboratorio
de múltiples mestizajes. El racismo nos abraza
y se encuentra muy bien acomodado en nuestro imaginario social y político. Ni hay voluntad política de las autoridades para que el
debate tenga movilidad en la esfera pública, ni
hay reglas mínimas preventivas desde el punto
de vista educacional. Hablar de racismo no es
fácil. Es uno de los temas que más incómoda
y una realidad presente en la experiencia
cotidiana. El racismo antinegro es una de las
marcas más visibles heredadas de la esclavitud, pero la sociedad civil tiene la obligación
de animar una conversación estructurada
sobre el tema todos los días y en todos los
espacios posibles. El racismo continúa siendo
un castigo social y hay muchas historias de
vidas marcadas por el dolor. El Estado cubano
no solo continúa perdiendo oportunidades
para que el tema forme parte de la esfera
pública, sino también pasando por alto las
recomendaciones del Comité para la Eliminación dela Discriminación Racial (CERD)
formuladas en marzo del 2011. Desde el lente
del poder se alarga la posibilidad de ser radical frente a la urgencia de dialogar públicamente sobre algo que puede contribuir a
28