IDEARIO DE LA EDUCACIÓN LASALLISTA PERUANA
regionalización y descentralización. Este escenario, de acuerdo a los principios tanto
de la Constitución como de la Ley de Educación, conlleva a construir diseños
curriculares que respondan a las necesidades educativas de la región y al desarrollo
de las culturas regionales. En este marco se debe abordar la relación entre lo urbano
y lo rural que en los últimos años no se ha considerado. Este dato es significativo
para la escuela lasallista que busca, desde la educación, superar las brechas sociales.
En esta perspectiva es importante comprender lo rural en su propia dinámica y no en
función de la escuela urbana. Eso implica reconocer su propia identidad cultural
ancestral que exige un tratamiento diferenciado y atento a sus necesidades y
aspiraciones desde una educación intercultural bilingüe respetuosa de la diversidad
cultural.
2. Demandas educativas de la realidad peruana actual
Para Francia en el siglo XVII las escuelas cristianas fundadas por san Juan Bautista
de La Salle aportaron al cambio del rostro de un pueblo sumido en la pobreza y
dividido por las creencias religiosas. Las escuelas lasallistas fueron una respuesta
creativa a la división de clases, al hambre, la exclusión y la violencia religiosa. Esta
respuesta a demandas concretas y urgentes, sumada a un modelo sistemático y
eficaz, fue determinante para que esta obra se multiplique por toda Francia y
posteriormente por todo el mundo. En la actualidad la educación lasallista en el
Perú está llamada a recrear el espíritu fundacional y a ofrecer una educación que
asuma los desafíos que identificamos a continuación.
Educación para el desarrollo humano sostenible: La riqueza natural del país así
como la crisis ambiental que vive el mundo, producto de la explotación irracional
de los recursos naturales, reclaman la necesidad de un enfoque educativo que
enfatice una nueva visión. Partiendo de esta constatación, este enfoque ha de
promover el desarrollo científico humanístico, el manejo racional de las
tecnologías así como el respeto y cuidado del medio ambiente y la biodiversidad,
en sintonía con la visión cristiana de la naturaleza y con las recomendaciones de
los movimientos que buscan un mundo para todos.
Educación ciudadana: Las condiciones socio políticas del país, y la enorme
fragmentación social que arrastramos por siglos, hacen de la educación
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