Hookah Magazine Hookah VOL I | Page 22

REPORTAJE POR PARTES LO INDISPENSABLE PARA DISFRUTAR Nos hemos decidido. Vamos a probar qué es eso de fumar una shisha. Pero lo primero es identificar convenientemente cada una de las partes que la componen. Una vez identificadas, ya podemos montarla y disponernos a preparar la fumada. Un ritual que no tiene nada que envidiar al de otros muchos placeres. N os hemos compra- do una pipa de agua para fumar en este curioso artilugio que está causando furor en multitud de ambientes. Para empe- zar, hemos de comprobar que la shisha que nos he- mos comprado venga con todos sus elementos esen- ciales (cazoleta, manguera, cenicero, gomas, pinzas, cuerpo y vaso). Y si hay instrucciones de montaje y uso, mejor. También hemos de tener en cuenta que la fumada requiere de un tiempo tanto de prepara- ción como de consumición y este último nunca suele ser inferior a media hora. El vaso de la cachimba he- mos de llenarlo de agua suficiente como para cubrir parte del tubo metálico que es continuación del cuerpo de la shisha, es decir, lle- nar aproximadmente dos tercios del vaso para que quede aire en el otro ter- cio que pueda acumularse el humo que inhalaremos en la fumada. Uniremos el vaso al cuerpo de la shisha evitando que se produzcan fugas de aire y colocare- mos la cazoleta con el ta- baco que hayamos elegi- do, apelmazado, pero no apretado asegurándonos de que circula el aire. Pos- teriormente, lo cubriremos con papel de aluminio para separarlo del carbón. An- tes de poner el carbón en- cendido al rojo vivo con las pinzas del kit que venía con la cachimba, realizaremos unos agujeritos dispersos en el papel aluminio para que el aire pueda pasar del carbón hacia la cazoleta y vaporizar el tabaco (nunca lo quema). Así, podemos decir que ya está todo listo para empezar a fumar. Una fumada que se inicia inha- lando a través de la man- guera (al principio cuesta un poco), de manera que el aire del exterior pasa a través del carbón y la ca- zoleta con el tabaco, atra- viesa ya en forma de humo el cuerpo de la cachimba tras vaporizar el tabaco de la cazoleta llegando al vaso inferior de cristal por deba- jo del nivel del agua y pro- duciendo unas burbujas. Al pasar por el agua, el humo se refresca y queda en el espacio ocupado por el aire hasta que se inhala de nuevo por la manguera. La pipa de agua se mantiene encendida por el efecto del cambio de presión que se produce cada vez que se in- hala por la manguera y va- ciarse el aire/humo conte- nido en el vaso, lo que hace que el mecanismo tire del aire exterior y atraviese de nuevo el carbón y el tabaco de la cazoleta. En caso de no haber fumado durante un periodo largo, es con- veniente deshacerse del humo acumulado en el vaso soplando por la manguera, en vez de inhalando, lo que hará que ese humo escape por la válvula situada en la parte inferior del cuerpo de la shisha Una vez finalizada la fumada se ha de limpiar la pipa de agua concienzu- damente para dejarla lista para un próximo uso. Lavar la cazoleta y el vaso, dejar bien limpias las mangueras para que no contengan par- tículas de tabaco soplándo- las... Es decir, no dejar ni rastro de la fumada para no notar los sabores en una sesión posterior. 22 | HOOKAH MAGAZINE VOL. 1 2017 Hookah1-p - Copia.indd 22 16/5/17 11:42