Hitos de la Historia núm.2 - Octubre 2018 | Page 23

September 2019 AÑO I - Nº2 Vol 1 Issue 21 PAGINA 22 Inside the Issue Uno va con la idea de un proyecto original, yo iba con mi proyecto original de las relaciones exteriores y llegué a PITT y me di cuenta que en realidad no es lo que pasa. Fui con una beca de Maestría para empezar (eran dos años), entonces llegué allá y claro me di cuenta que en realidad PITT tenía otro fuerte. La historia de América Latina se enseña de otra manera, hay una historia política, una historia intelectual, una historia de relaciones internacionales y, más recientemente, ha aparecido la historia social pero la historia que yo quería hacer no encajaba en el Departamento de Historia de PITT. Es un departamento que tenía buenos latinoamericanistas pero tenía gente que hacía labor history  o historia del trabajo, historia social, con fuerte impronta  de la historia social estadounidense y británica, era otra cosa que yo tuve que aprender porque no había tenido esa formación. A medida que empecé hacer eso me empezó a interesar cada vez más. Y ahí fue cuando decidí cambiar dentro del programa de estudios latinoamericanos, ahí en el Departamento de Historia, empecé a tomar temas más latinoamericanistas pero siempre con la ideas hacer una historia de las ideas, una historia social de las ideas, tratar de entender un poco más. Entonces mis tesis de Maestría en PITT, al final de 2 años, una fue sobre el Revisionismo Argentino comparando distintos estudios del Revisionismo Argentino. Varios de los revisionistas yo los había tenido, de hecho, de profesores en UNCuyo, fue un estudio de 4 de estos personajes y bueno fueron las visiones del pasado y las diferencias y tensiones y como eso se enmarcaba en el contexto donde habían escrito. Y el otro trabajo, eran 2 trabajos de Maestría, era una especie de trabajo historiográfico comparativo sobre cuestiones raciales y Estado en Brasil, Colombia y República Dominicana. Y ese trabajo se publicó eventualmente en la Revista Cuadernos Americanos después en México, ese fue mi primer trabajo publicado ese fue el primero. Pasaron los 2 años y uno dice: "esto está lindo, nos quedamos".     El programa de doctorado fue intenso porque me daban el teaching fellowship que significaba  que me pagaban los estudios me daban un estipendio para vivir.      En: ¿Sería una beca de parte de la PITT pero con algunas características de las becas del CONICET para doctorarse?      JN: Era una beca pero con prestación de trabajo. Yo tenía que dar clases. Era intenso porque además de eso, nosotros tomábamos los cursos que eran los seminarios de posgrado. Es otra forma, en Argentina hay posgrados de fin de semana, posgrados parciales, en EE. UU. es muy intenso porque la reuniones [de cada uno de los seminarios] son una vez a la semana, 3 horas y basado, básicamente, en que cada seminario son alrededor de 250, 300 páginas por semana. Y estas tomando 3 o 4 seminarios por semestre. Además de todo el trabajo que haces, tenés que leer y en cada uno [de los seminarios] tenés que producir. Además de eso, tenés que trabajar en la tesis de Doctorado. En: ¿Su investigación doctoral versó sobre los liberales en la primera mitad del siglo XX?        JN: Exactamente, la pregunta original de la tesis fue: ¿qué pasó con el liberalismo en la Argentina después de 1930? Lo que yo encontraba, y acá sí uno puede ver un línea donde se observa que a mí me interesaban las cuestiones de la historia intelectual, cultural, social, la historia de las ideas es como un campo que es él que me atrae realmente. Una historia de las ideas no por la idea en sí mismo sino por lo que hice alrededor de redes culturales, intelectuales, políticas, todo esto y ese es mi enganche con la historia social. El proyecto yo lo planteé qué había pasado con el liberalismo después de 1930. Lo que yo encontraba es que la mayoría de los estudios hablaban de que liberalismo había sido hegemónico en el siglo XIX, había cantidad de estudios sobre Alberdi, Sarmiento, la Generación del 80, Roca, Los liberales reformistas, de Eduardo Zimmermann en el año 1995, era lo más novedoso que había salido.  Pero después de los 30 la narrativa cambiaba acerca del golpe militar, la Década Infame, el auge del antiliberalismo, el nacionalismo, el catolicismo, el peronismo y de repente lo que encontraba era que el liberalismo se había vuelto..., o todo el mundo lo estudiaba, frente a lo cual todas los otras corrientes reaccionaban: el peronismo criticaba al liberalismo, los nacionalistas criticaban al liberalismo... y se habla del término "los liberales" y era un término muy vago, ¿qué significaba? Mi pregunta original era: ¿qué pasó con el liberalismo? ¿quién se decía liberal? ¿y qué significado para ellos tenía ser liberal? El liberalismo en el mundo está en un momento en cuestionamiento. Pero hay distintos liberalismos: está el liberalismo de onda reformista (que es el liberalismo de Roosevelt y el New Deal y otras corrientes de Europa contemporáneas), está el liberalismo clásico que se reinventa en los 40 con Hayek, von Mises, la Escuela Austríaca y todo esto. Entonces mi pregunta era: ¿qué pasó en Argentina? ¿hay algo como esto? Y me metí y lo que descubrí fue un mundo de enorme vitalidad. Donde sí había grupos políticos, un liberalismo fracturado ciertamente: en los radicales había corrientes que reindivicaban el liberalismo, los socialistas, el partido Democrátaprogresista. En el ámbito cultural una serie de gente: el Grupo Sur, hasta liberales católicos que confluyen en la revista