LA RELACIÓN
ERA SENCILLA
Él era un hombre muy cariñoso, incluso
empalagoso, de quien aprendió poco, como
a tolerar sus asfixiantes y controladoras
manifestaciones afec�vas “me sen�a como
muy acorralada”. La relación era sencilla,
con conflictos derivados de su tendencia a
compararlo con sus novios anteriores, salían
a comer pero nunca a bailar o consumir licor,
pues no le gustan este �po de diversiones:
“salíamos a caminar, a pasear…, hasta que…
me fui a vivir con él… él era ya, como que la
úl�ma opción que tenía, como que ya era el
momento”. Desde que empezó la convivencia
él la presionó para tener un hijo, pretensiones
que María inicialmente no acepta y consume
an�concep�vos a escondidas: “Desde que
nosotros empezamos la relación… él quería
que yo quedara embarazada, y yo decía, pero
no me da la gana, no es lo que tú digas, es lo
que yo quiera…, cuando yo me sienta lista yo
te meto el tema, si yo no te meto el tema no
�enes porqué acelerar el proceso”.
Una vez graduada en Ges�ón Logís�ca,
trabajó por siete meses en la Alcaldía con la
Umata, donde desarrollaba labores en zonas
rurales, recorriendo trochas hasta que quedó
embarazada, no�cia que le causó gran felicidad,
“creo que es un sueño que todas tenemos a
par�r de los 18…, yo antes pensé…, porqué
tan temprano, si tengo una vida por delante,
no he estudiado, no tengo ningún �tulo, qué
futuro le puedo dar…, pero…, bueno cuando
se dé el momento que se dé pero que sea
con alguien responsable…, en el momento él
respondía por su trabajo…, no le veía nada
raro ni nada, como para que me diera a
sospechar como no con él no es…, hasta que
lo decidimos entre los dos” Cuando lo
decidieron ella estaba trabajando y su sueño
era seguirlo haciendo pero se vio obligada a
dejarlo, dada las tareas que desempeñaba que
implicaban un alto riesgo para su gestación;
“yo decido salirme y el papá del niño queda
sin trabajo”.
María inicialmente no advierte su embarazo,
pero su pareja sí, pero ella lo negaba
reiteradamente; ante su escep�cismo,
el aborda a su suegra y también se transmite
la inquietud al padre de María quienes la
obligan a prac�carse una prueba que salió
posi�va a sus 4 meses de gestación.
El embarazo transcurrió sin contra�empos
aparentes hasta los siete meses, cuando en
el marco del control prenatal es atendida
por una ginecóloga quien diagnos�ca el
inicio de dilatación cervical y le prac�ca una
ecogra�a de urgencia, donde detecta “muchas
malformaciones” congénitas. Le transmite a
María la información y ordena hospitalizarla.
OPCIÓN
la úl�ma