Historia del Mercado de Tortosa LLIBRE+MERCAT+DE+TORTOSA+FINAL | Page 58

Empero, sea la que quiera la causa de tan injustificable como continuo abuso, éste debe desaparecer y pronto, muy pronto Sr. Alcalde y aún formarle expediente al referido Sr. Abril, para que restituya a prorrateo los sueldos que ha cobrado sin ganarlos, sin que le sirva de excusa el que sus cotidianas ausencias son con anuencia y permiso de sus superiores; toda vez que las facultades de los mandatarios nunca alcanzan hasta permitir que se defrauden los intereses del mandante, que es el contribuyente. ¡Afuera, pues, los empleados que liban sin ganársela la miel del panal Municipal. -------------------------------- Por consecuencia, sin duda, de las repetidas ausencias de nuestro Arquitecto Municipal, hemos tenido ocasión de observar como Don Bernardo Sacanella, Secretario del Banco de Tortosa y primer Síndico, todo en una pieza, (¡y Viva la legalidad!) ocupa la plaza de aquel, puesto que, con esa poca… aprensión que distingue a D. Bernardo, dirige la colocación o trazado de las aceras frente al Mercado en construcción, sueño dorado de sus ilusiones. También es de presumir el que por la propia causa de la evaporación de nuestro cuco Arquitecto, se haya encargado cierto jovencito, sin práctica ni carácter para ello, de rectificar la alineación de uno de los puntos del arrabal de las Ferrerías. Vámos, que la cosa tiene miga ¿no es verdá usté Sr. Alcalde? Pero, basta ya de matemáticas, y a ver como metemos en cintura, y bien estrecha, a ese Arquitecto nominal, a fin de acabar con tantas informalidades y tantos absurdos. ¡Ah! Y de paso, no fuera malo que se le hiciera comprender a D. Bernardo que su puesto está en otra parte, y que ni olvide aquello de: «Zapatero a tus zapatos» Lo extraño es que el comentarista, no cite de su prolongada ausenta, abandonando las obras del Mercado en construcción. ACUERDOS – 27 de Julio de 1885 (55) En vista de la petición del Arquitecto D. Juan Abril, se acordó concederle dos meses de licencia para el completo restablecimiento de su salud, entendiéndose que el uso de aquella, deberá ser sin sueldo, nombrando interinamente para la dirección de las obras municipales, a D. Prudencio Barber, Ayudante del Cuerpo de Obras Públicas, con la mitad de sueldo correspondiente a la plaza de Arquitecto. Tantas licencias… O sea que, cuando mas hace falta el Arquitecto para dirigir las obras del Mercado, se ausenta, dejando en su lugar a un inferior, que cobra la mitad… y si hay algún percance, quien es el responsable? Y es que nuestro Arquitecto, ante las malas noticias de la epidemia, decide poner los pies en polvorosa, para librarse de morir a tan temprana edad. El pretexto el de siempre, atender su quebrantada salud… CORREO DE TORTOSA - 1º Septiembre de 1885 Esta mañana se ha venido abajo uno de los andamios de las obras del Mercado y con él, tres o cuatro obreros que en el mismo había, los cuales - 58 -