Historia del Mercado de Tortosa LLIBRE+MERCAT+DE+TORTOSA+FINAL | Page 161

y abonando este mientras no pueda reintegrarla el interés a razón del 5 por ciento anual. La simple enunciación de solución semejante, subleva el ánimo de la persona mas tranquila, porque nada falta para que se abran a la luz todos los ojos, hasta la circunstancia verdaderamente irónica de fijarse un interés de cinco por ciento por una cantidad que no consta en parte alguna que deba abonarse. ¡Cómo! Si realmente debe el Ayuntamiento la cantidad de 28.000 duros sobre los 35.000 de la contrata, ¿porque ha de abonarse el cinco, y no el seis por ciento al año que es el interés legal? ¿Desde cuando se ha visto que una entidad de crédito haga limosna de un uno por ciento anual sobre una cantidad empleada en la explotación de un negocio? ¿Es que en vez de una sociedad de negocios, quiere aparecer el Banco de Tortosa, a los ojos de los concejales y del público como una cofradía de Paúles? ¿O es que considera su pretensión tan destituida de fundamento que se ha figurado cohonestarla, renunciando un interés que de hecho le correspondería, si hubiese un solo tribunal que pudiese sancionar el absurdo de condenar al Ayuntamiento al pago de esos 28.000 duros? Nuestras gestiones de ver el dictamen, han sido infructuosas. Los dignísimos concejales que en la tarde del lunes y en la mañana del miércoles intentaron, en uso de un derecho incuestionable, extractar o copiar el dictamen, no fueron mas afortunados. Y aquellas decantadas promesas de la Presidencia en la sesión municipal del lunes por la mañana, resultaron agua de borrajas. Y bueno es que se vaya tomando nota de cuanto sucede. Hasta ahora se había creído buenamente, que la presidencia de las sesiones del Mercado se había reservado para el primer teniente de alcalde D. Ramón Piles. Responsable es el Sr. Piles de sus actos; y no se excusa de ellos; tiene al menos esa ventaja. Pero hora es ya que desaparezca el velo con que parecía cubierto el Alcalde, D. Pascual Ballesté. Este último señor es el que presidió la sesión de 31 de Diciembre de 1888, y quien designó los tres letrados que habían de emitir el dictamen; y ese mismo señor es el que ha presidido la sesión en que el dictamen ha sido leído. Este señor es el que en la sesión del lunes prometió la mayor publicidad al asunto y que el dictamen quedaría en Secretaría a disposición de los señores concejales; Y a pesar de sus promesas, los concejales de la minoría, no han podido, hasta la hora presente, enterarse por si mismos del contenido del dictamen, ¿No resulta del último párrafo un cargo contra el Alcalde D. Pascual Ballesté? Indudablemente, por que sus promesas, oficial y solemnemente fueron hechas; y el cargo resulta, mientras no sea pública y oficialmente desautorizada la conducta del empleado que obró en oposición manifiesta de las palabras solemnemente pronunciadas por el Alcalde. Recordemos antecedentes. El Alcalde D. Pascual Ballesté fue el que denunció los tres periódicos locales que combatieron las pretensiones exorbitantes del Banco, desde los principios de esta cuestión. Hizo lo mismo, exactísimamente lo mismo que ha hecho el Teniente de Alcalde D. Ramón Piles, denunciando a los tres concejales que se oponen a dichas pretensiones. Hizo lo mismo, exactísimamente lo propio que ha hecho el Secretario del Banco de Tortosa, D. Bernardo Sacanella, querellándose, sin razón ni fundamento, contra EL ORDEN. Todo obedece a un mismo plan. - 161 -