Historia del embalse del Muña Historia Embalse del Muña | Page 3

Motor Columbus, que había ofrecido 1940 y el inicio de las obras se veía enviar un ingeniero especialista que prolongado una vez más, en esa por sólo $35.000 hiciera la oportunidad se debía negociar con el verificación sobre el terreno. Al gobierno por el retiro de la línea del tiempo que se realizaban los ferrocarril que comprende el tramo estudios, la compañía adquirió los entre Chusacá y San Miguel, puesto predios necesarios para la que esta se encontraba en el lugar construcción del embalse. En agosto planeado para el proyecto de 1935 Balmes Hernández aceptó el hidroeléctrico. Después de precio de $200 por fanegada de tierra negociaciones y ofrecimientos, la para los terrenos de su propiedad que compañía acordó con el Ministerio de cubriría el embalse de El Muña; en Obras públicas, a cambio del septiembre se compró la finca “El traspaso de la zona del ferrocarril, Pensil” y posteriormente se construir por su cuenta la plataforma adelantaron negociaciones con los para la variante de la carretera y dueños de la hacienda pagar las zonas que haya necesidad “Tequendama”. de comprar para construir dicha obra; Las negociaciones por las tierras eran tareas engorrosas, por lo cual se contrataron los servicios de Enrique Balmes y Bermúdez y Valenzuela, habitantes del lugar, para la compra de los lotes faltantes. Cuatro años después, en diciembre de 1939 las sumas del valor de esos terrenos alcanzaron los $275.311,34, lo cual excedió en gran medida la suma presupuestada, debido a la adquisición de terrenos estrictamente necesarios para la construcción del embalse. Transcurría diciembre de lo que el gobierno aceptó y se comprometió en prestar el equipo necesario para la construcción de la plataforma y la pavimentación de la vía alterna; así también, se comprometió a entregar a las Empresas Unidas el dominio del puente del ferrocarril sobre el río Muña. En mayo de 1941 fueron estudiadas las propuestas de las firmas interesadas en la construcción de la presa. Después de la revisión, el consejo seleccionó a la firma Archila & Brunasso Ltda., ya que esta