acería
de aluminio. En las gráficas de las Figuras 7 y 8 se muestra el comportamiento del consumo de aluminio de los 2
grupos de referencia.
Nota importante: En esta evaluación no están consideradas las coladas vaciadas con alto carbón y desoxidadas
con aluminio en alambre.
Figura 7. Grados grupo II después de la aplicación de las tablas optimizadas.
Periodo mayo al 15 de junio 2003.
De estas 2 gráficas después de la aplicación de las nuevas tablas de desoxidación, se aprecia un mejor ordenamiento de los datos en donde se ve claramente la dependencia del consumo de aluminio respecto a las ppmO2.
Además es posible observar, que con el fin de disminuir
el consumo de aluminio, es importante trabajar con niveles bajos de oxígeno, logrando mayores beneficios con
contenidos menores a 600 ppmO2. Es aquí en donde
radica la importancia de una práctica de soplo adecuada
y la asertividad del modelo de calculo de carga.
Adicionalmente, las tablas desarrolladas establecen el
contenido de carbono residual máximo posible permitido
para vaciar, considerando la pérdida de carbono cuando
existe alto carbón residual.
De los resultados obtenidos para ambos casos se tiene
con respecto al grupo II, de un consumo de 276.8 kg/col
y un contenido de aluminio en el acero de 0.040%, disminuyó a 255.46 kg/col. y a un contenido de aluminio en
el acero de 0.041%, lo que representa un ahorro de 21.34
kg/colada.
Para el caso de los grados del grupo III, se tenía un consumo de 263.3 kg/col. Con un contenido de aluminio en
el acero de 0.039%, disminuyó a 249.5 kg/colada y u