Primero, el más frecuente:“ el piso pélvico solo se debilita cuando tuviste hijos o partos”. No es cierto. Hay mujeres que pueden no haber tenido ningún parto y, por el simple hecho de tener actividad en la que se aumente constantemente la presión abdominal— que estén estreñidas, que sean tosedoras crónicas, que hagan ejercicios de alto impacto—, puede haber un debilitamiento del piso pélvico sin importar la edad ni que
hayan tenido hijos. Otro mito:“ necesitamos fortalecer el
suelo pélvico hasta que tengamos incontinencia”. Mal. Todas las mujeres debemos fortalecer nuestro piso pélvico toda la vida: antes de tener hijos, después de tener hijos, durante la menopausia, después de la menopausia. Cuando las mujeres tengamos la educación de ser conscientes de esta área anatómica y de cómo fortalecerla desde que somos adolescentes, esto va a hacer que cuando seamos adultas tengamos muchos menos problemas urinarios, de prolapso,
fecales e inclusive de tensión sexual. Tercer mito:“ no hay medicamento
que fortalezca el piso pélvico”. Correcto, ni tratamientos con energía, ni el láser, ni la radiofrecuencia. El único medio para fortalecer el piso pélvico son todas aquellas terapias que van enfocadas a fortalecer los músculos: ya sea a través de energía eléctrica( que es la electroestimulación), a través de ondas magnéticas( otra terapia que funciona bastante bien), o se pueden fortalecer los músculos a través de ejercicios, guiados siempre por un fisioterapeuta. Pero no hay un medicamento que uno se pueda tomar que actúe en el piso
pélvico para tener un piso pélvico fuerte. Cuarto mito:“ lo único para fortalecer
el piso pélvico es hacer ejercicios”. Tampoco. Fortalecer el piso pélvico implica ejercicios de postura, de respiración, de fortalecer el abdomen, de saber cómo tenemos que agacharnos, de contraer los músculos del piso pélvico. Por eso es fundamental que estos ejercicios se hagan por medio de especialistas que tengan conocimiento específico: los fisioterapeutas de piso pélvico.
El urólogo, que es otra especialidad, se enfoca en el tracto urinario y su principal formación es en el hombre. No es que estemos peleados, sino que trabajamos en conjunto, pero todo lo relacionado con el piso pélvico y el tracto urinario femenino es nuestra área.
7. Health Experts( HE): Como impulsora de la salud del piso pélvico, ¿ qué cambios le gustaría ver en el sistema de salud mexicano para mejorar la atención de estas condiciones y qué consejo daría a las mujeres para ser más proactivas en el cuidado de esta área de su salud?
Hablar del sistema de salud es complicado. Si pudiera tener una varita mágica, cambiaría muchas cosas. Pero parte de lo que es fundamental es la enseñanza, porque lo que no enseñas a los médicos, no lo van a ver ni lo van a tratar. Yo buscaría promover más la concientización desde los médicos generales y, por supuesto, todos los médicos que nos dedicamos a la atención de la salud de la mujer.
Segundo: tiene que haber más fisioterapeutas de piso pélvico. Me encanta que en México ya hay una Sociedad Mexicana de Fisioterapeutas de Piso Pélvico. Eso ya es un avance enorme, porque son grupos de gente que se encarga de fortalecer estos músculos, de enseñar, de dar terapia y que, además, tienen una formación certificada. No todos los fisioterapeutas saben cómo fortalecer el piso pélvico, así que esto es un avance muy grande.
Estamos en muchas mejores condiciones que otros países de Latinoamérica, y eso te lo puedo decir con certeza. En otros países, sobre todo de Centroamérica, no hay fisioterapeutas de piso pélvico; nosotros ya estamos en este paso. Tampoco creas que de este lado de América estamos tan bien. Donde más desarrollada está la terapia de piso pélvico es en Europa, ni siquiera en Estados Unidos.
Lo que creo que debería haber es que en todos los hospitales en los que se atiende a mujeres, así como hay un ginecólogo, tiene que haber un fisioterapeuta de piso pélvico. Así como es parte de la salud de la mujer hacerse un Papanicolaou, es parte de la salud de la mujer cuidar su piso pélvico.
¿ Qué creo que las mujeres tenemos que cambiar? La conciencia de decir“ tengo algo allá abajo que se llama piso pélvico” y cuidarme desde que tengo conciencia. Saber cómo tengo que hacer ese cuidado: desde cómo caminar, cómo respirar, cómo ejercitar los músculos, qué tengo que evitar de mi alimentación. Una serie de modificaciones de hábitos, y cuando noto que tengo algún síntoma, inmediatamente acudir con alguien que me ayude a tratar el problema que estoy teniendo y a fortalecer esta parte muscular.
Entre más compartamos esto entre nosotras como mujeres y como profesionales de la salud, finalmente vamos a lograr una red de conocimiento mucho más grande. A mí me encanta ver que hay gente que se preocupa por esto, pero como ya saben, cuando un tema empieza a estar de moda, el gran inconveniente es que pueden abusar de él para recomendaciones que no sean adecuadas. Verifiquen que sea de gente que tenga experiencia y que esté avalada para dar esas recomendaciones. Siempre tenemos que tener información previa para saber que no tenemos contraindicaciones para poder hacerlo.
Cuanto más hablemos de lo que sentimos, de lo que nos preocupa, y tomemos conciencia de nuestra salud, vamos a ayudar a que este conocimiento se difunda más, tanto entre médicos como entre pacientes.
HealthExperts. JUNIO 2025 21