LA ESTRATEGIA DE SELECCIÓN DE PABLO
Al dar una lectura del Nuevo Testamento parecería que hubo al menos cinco aspectos a los que podrían llamar la estrategia de selección de Pablo
Basado en la preparación de personas.
Aunque Pablo estaba deseoso de traer el testimonio entre las personas y en Jerusalén misma, él fue especialmente preparado y encargado para ir a las personas Gentiles (Hechos 26:15–18). El Nuevo Testamento lo deja abundantemente claro, sin embargo nuestros Jerusalenes y las partes primordiales son incluidas en la Gran Comisión, el llamado en algunos para llevar el evangelio y construir la iglesia en las fronteras espirituales es una parte principal del plan divino. La estrategia y el ministerio de Pablo no pueden ser comprendidos en absoluto aparte del reconocimiento de este mayor plan de Dios para su mundo caído.
A quienes respondieron
Aunque Pablo tuvo una preocupación con todos, él le proporcionó cierta prioridad a judíos y Gentiles que podrían estar esperando para responder al evangelio. Al menos en las anteriores etapas de su ministerio él fue a las sinagogas, dónde él encontró a judíos y Gentiles temerosos de Dios. Cuando muchos judíos demostraron ser resistentes al evangelio, él recurrió progresivamente a los Gentiles. Pero aun así él les proporcionó cierta prioridad a los Gentiles que temerosos de Dios, cuyos corazones Dios ya había preparado a través de su asociación con los judíos y su culto del Dios de Abraham, Isaac, y Jacob.
Los ejemplos del nuevo Testamento son numerosos pero en ninguna parte es más claro que en el ministerio de Pablo en Corinto. Allí desde el principio él vivió y trabajó con Aquila y Priscilla, una pareja judía recientemente venida de Italia. Luego él ministró en la sinagoga y dentro de la comunidad judía. Cuando resultaron ser altamente resistentes, él recurrió a la comunidad Gentil (aunque Lucas tiene el cuidado de señalar que Pablo fue a la casa a Ticio Justo uno que temía a Dios, quien vivió muy cerca de la sinagoga). Finalmente muchos Corintios creyeron y fueron bautizados (vea a Hechos 18:1–8). Puede haber una duda pequeña que la estrategia de Pablo conllevó prioridades, y que la receptividad estaba entre ellas.