de comida que ingería . Ya a los 18 años de edad escribía algunas notas sobre los platos que comía , pero sin más ; y no fue hasta que cumplió los 26 , cuando empezó a realizar detalladas ilustraciones de todo aquello que pasaba por su mesa . Desarrolló una manera de documentar , a través de la ilustración y la palabra , todos los alimentos que pasaban a formar parte de su menú diario , quedando reflejado en auténticas obras de arte .
Así sus recuerdos no quedarían relegados al rincón oscuro y remoto de su memoria ; estarían presentes en todo momento junto con pequeñas anotaciones al margen de las sensaciones que en su día le hicieron experimentar .
En diciembre del año 2014 , el trabajo de Itsuo Kobayashi dio un giro inesperado . Era el quinto año consecutivo que se celebraba la exposición de arte de personas discapacitadas de la Prefectura de Saitama y a ella acudió Nobumasa Kushino , antiguo curador [ 4 ] en el “ Museo Tomonotsu ” en Tomonoura , ciudad de Fukuyama , prefectura de Hiroshima , y miembro del personal de un centro de asistencia social para personas con discapacidad intelectual desde el año 2000 hasta el 2016 .
Tras independizarse de todo ello , abrió la galería de arte “ Kushino Terrace ”, convirtiéndose tiempo después en su representante , así como el de muchos otros artistas desconocidos por la sociedad . Hoy en día su arte ilustrado es reconocido por multitud de críticos y coleccionistas de arte del mundo entero . Y no solo hace ilustraciones bidimensionales de platos de comida , sino que también experimenta con dibujos para libros pop-up Kobayashi se ha dedicado , a tiempo completo , a ilustrar su comida y a añadir notas en las que describe todo lo que ha saboreado . Además aprendió él mismo , sin clases ni estudios artísticos , solamente sintiendo y recordando .
Itsuo Kobayashi no puede salir mucho de casa debido a su enfermedad . Sin embargo , eso no le impide crear arte con los alimentos que llegan a su casa . Ya sea que pida su comida a domicilio o que su madre le lleve platillos de distintas zonas de Saitama , el chef y artista captura gráficamente cada elemento de sus comidas con una perspectiva cenital : de esa manera puede apreciarse cada ingrediente . En su habitación , además de la cama articulada en la que se encuentra la mayor parte de las veces , hay una mesa llena de rotuladores , pinturas , papeles , tijeras , lápices , reglas , conchas de mar , palillos de madera para comer , monedas … y un cenicero con varias colillas apagadas . En ella no encontraremos ni una cámara fotográfica , ni un teléfono móvil .
Kobayashi añade , además , nombres y precios de sus alimentos , además de notas que después puedan recordarle cuando comió algo delicioso o que lo hizo sentir muy bien .
Y tú , ¿ llevarías un sketchbook o un diario de tus comidas ? El trabajo del chef japonés es un recordatorio de que no es necesario recorrer el mundo para ilustrar las cosas hermosas que vivimos a diario .
17