Gestión del Riesgo en Colombia Gestion Riesgo Banco Mundial Colombia | Page 236

adoptando un enfoque proactivo y estratégico, en consideración a los principios de comple- mentariedad y subsidiaridad definidos por la Constitución Política de 1991. Estas capacidades municipales están claramente diferenciadas de acuerdo con la categorización dada por el DNP y el DANE, lo que permite plantear recomenda- ciones para los municipios con capacidad alta, intermedia y baja (capacidades definidas en el Capítulo 2 de este documento). Revisar estructuralmente las limitacio- nes en capacidades para la evaluación del ries- go de desatres en aras de dar respuesta efectiva a la demanda de conocimiento para los POT y los PD. La implementación de la estrategia de apoyo técnico, coordinada entre las entidades nacionales y los departamentos, es imprescindi- ble para la actualización de los POT municipales y la formulación de los PD de las jurisdicciones de menos de 50 mil habitantes. De acuerdo con la Ley 507 de 1999 el Gobierno Nacional ha imple- mentado asistencia técnica local, especialmente a través del MVCT, la UNGRD y algunas CAR. No obstante, se requiere aunar esfuerzos de otras enti- dades gubernamentales como el IGAC, el DANE, el Ideam, el Servicio Geológico Colombiano y universidades o centros de investigación, con el fin de optimizar la adquisición de información re- querida por los municipios para la planificación y gestión territorial, teniendo en cuenta la cobertura y escala apropiadas. Asimismo, es preciso que los departamentos lideren y apoyen con mayor fuerza la formulación de los POT, y la incorporación de la gestión del riesgo en los PD municipales. Diseñar e implementar los Planes Terri- toriales de Gestión de Riesgo (PTGR) como instrumentos de carácter estratégico y pros- pectivo, que orienten y permitan priorizar las intervenciones y las inversiones a nivel municipal y departamental. El PTGR preten- de contribuir a la apropiación del conocimiento de los escenarios del riesgo, a la aplicación de intervenciones integrales para la reducción y el control del mismo, y al fortalecimientos de la acciones para el manejo de los desastres. Te- niendo en cuenta que dicho instrumento denota un carácter altamente participativo, el conjunto de agentes institucionales y sociales que inter- vienen en su diseño e implementación deben estar involucrados en la toma de decisiones. En ese contexto, el PTGR es formulado por equipos técnicos de las instancias responsables en cada unidad territorial, y concertado a nivel político e institucional para generar una mayor apropia- ción y establecer los criterios de priorización según las necesidades (bancos de proyectos). Así, se deben concertar las agendas, o planes de acción, articuladas entre las entidades res- ponsables para desarrollar procedimientos in- ternos, definir tareas, canalizar y optimizar la utilización de recursos disponibles (entidades municipales, empresas públicas, sector priva- do, gobernaciones, CAR, etc.), pues el PTGR debe posibilitar la orientación del presupues- to requerido para la gestión del riesgo de cada una de las entidades que participen en él, según sus funciones. A las instancias de planeación y hacienda les corresponde mejorar los mecanis- mos de asignación de recursos a los distintos objetivos, políticas y tipos de gasto, para ratifi- car, desde su origen, la reducción del riesgo en el ámbito municipal y distrital. A continuación se relacionan algunas recomendaciones especí- ficas a considerar en los PTGR: • Profundizar en el conocimiento de la ame- naza, la vulnerabilidad y el riesgo, para mejorar la acción de los entes territoriales y de la sociedad en la gestión del riesgo. La planificación debe estar acompañada de una mayor inversión en conocimiento y evaluación de amenazas y riesgos, que per- mita orientar decisiones con base en escalas de trabajo ajustadas y una visión dinámica Rol de la administración del territorio en la gestión del riesgo de desastres 211