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bierno (1979-1990). Sin embargo, la aplicación de este credo no fue automática. Es más, ella tuvo que hacer frente a un contexto adverso en un doble sentido: a) muy pocos en su partido consideraban que fueran los adecuados para retomar el gobierno británico. b) los tories se encontraban en la oposición frente a un gobierno laborista preso de su política de cesión ante los sindicatos. Para Brian Walden, los Primeros Ministros tories en el pasado se habían comprometido a no desmantelar el Estado de Bienestar pero lo cierto es que tampoco habían introducido grandes mejoras en el mismo. Sin embargo, veían la aceptación del consenso de posguerra como la única forma de ganar unas elecciones. La derrota en las generales de 1974, hizo necesaria una nueva estrategia. Thatcher fue la encargada de idearla y de aplicarla. Norman Tebbit (hombre fuerte en sus sucesivos gobiernos) arremetió con fuerza contra algunos de los líderes del pasado del Partido Conservador por su pragmatismo (¿o posibilismo?). Para ello delimitó una serie de etapas donde el primer paso para la recuperación de su país consistía en bajar los impuestos. La segunda, en liberar al individuo del control que sobre él ejercía el Estado. La tercera, buscar un equilibrio entre los derechos y las obligaciones de los sindicatos que se estaban convirtiendo en los auténtico controladores de la vida política y económica de Reino Unido. La cuarta etapa el control sobre el crimen. Recuperar el respeto hacia la ley y el orden algo que se tiene que iniciar desde abajo, desde las escuelas. La reforma del sistema educativo, suponía, en consecuencia, la quinta fase. La sexta tenía que ver con la defensa para lo cual Thatcher partió de una serie de premisas: a) la peor situación para un país es no estar capacitado para defenderse. b) vivimos en un mundo cada vez más peligroso, con la URSS apostando por el rearme por lo cual era un error