carácter narrativo biográfico, pues ya se habla del método biográfico en educación
(Sánchez Valle, 1994a). Algo similar parece estar ocurriendo con los grupos de
discusión.1
En la Tabla 7.1 hemos recogido las clasificaciones elaboradas por diversos
autores, en la que se puede observar coincidencias y también divergencias en la
identificación de los diversos métodos cualitativos.
Ciertamente, no es fácil realizar una distinción clara entre perspectivas
epistemológicas, teóricas y métodos de investigación específicos, puesto que
muchas orientaciones teóricas constituyen a su vez un modelo con pautas
específicas para el desarrollo del trabajo empírico. Así, Tesch (1990) señala que
es imposible construir una tipología clara y excluyente de categorías que permitan
clasificar los diferentes tipos de investigación cualitativa (la autora identifica más
de cuarenta tipos de investigación cualitativa) y nos propone dos formas posibles
de organización: una, en función de la raíz disciplinar fundamental que orienta los
métodos y procedimientos de investigación, y una segunda, en función de los
objetivos de investigación, tal y como hemos visto en el capítulo anterior.
1
Realmente, en muchas ocasiones los investigadores nos encontramos con dificultades a la hora de
clasificar metodológicamente nuestros estudios, pues éstos se hallan a medio camino entre la estrategia y el
método. Cada vez más se desarrollan trabajos de investigación socioeducativos (descriptivos, evaluativos...)
que inc