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En 2001 adquirió por 2 500 MMD a Southdown, en 2005 a RMC Corporation por 5 800 MDD y Rinker por 15 300 MDD. Para que Cemex comprara a RMC Corporation en 2005, en particular para la adquisición de Rinker en 2007, fue necesario contratar una elevada deuda con el sistema bancario, esto fue posible gracias a que en aquellos años su liquidez estaba respaldada su flujo de efectivo así como de sus líneas de crédito bancario.
En 2007-2008 con la crisis iniciada en el sector inmobiliario, las ventas de Cemex disminuyeron sustancialmente, lo que provocó que los bancos presionaran para cobrar sus adeudos. Para afrontar la crisis financiera de 2008, redujo en diez por ciento su planta laboral de 63 mil empleados en todo el mundo, vendió bienes por el orden de los dos mil millones de dólares y aumento el precio del cemento en ocho por ciento.
La crisis financiera mundial y la desaceleración económica general se convirtieron fondo de la crisis de Cemex. La gran deuda que contrajo para adquirir Rinker implicaba un gran riesgo, sin embargo Cemex Way era la estrategia que había aplicado en ocasiones anteriores con excelentes resultados. La adquisición de la empresa Rinker dejó a Cemex en un estado de fragilidad financiera que la caída de la economía mundial empujo a la crisis de esta poderosa compañía. En un escenario en donde la gerencia de Cemex no hubiera adquirido Rinker, su capacidad de producción se habría mantenido en 93.2 millones de toneladas y su nivel de deuda en 7 542 MdD. Para 2007 como resultado de la adquisición de la empresa australiana su deuda total se elevó a 19 853 millones de dólares. La crisis de Cemex la obligó a firmar un contrato de financiamiento con sus acreedores y que amenaza con mayores reducciones de su capacidad productiva.
Conclusión
Después de analizar la información generada por Cemex y la variedad de noticias sobre el tema; concluimos que si no hubiera adquirido a Rinker, Cemex habría estado en una mejor situación para afrontar la crisis y estaría lista para emprender nuevamente su proceso de crecimiento con el modelo Cemex Way, sin embargo, actualmente se encuentra por debajo para hacer frente a la competencia de las otras corporaciones cementeras. Aunque el riesgo de cada adquisición era calculado y evaluado por la dirección financiera de la empresa, no fueron capaces de prever una crisis financiera que impactara en su sector de la economía mundial. Y por lo tanto redujera la actividad económica en todo los mercados en que Cemex operaba.