FARMACOECONOMIA 1 | Page 5

 Incorporar a los protocolos y guías de práctica clínica hospitalarias los medicamentos que presenten una mejor relación coste/efectividad y/o calidad de vida. Y a responder a preguntas como: ¿Justifica el ahorro en los costes la menor efectividad del ¿Cómo se decide si el incremento en efectividad merece el precio extra que se paga por este medicamento más caro? ¿Entre dos medicamentos con eficacia demostrada para una misma indicación, cuál utilizar? En sociedades industrializadas capaces de regular y controlar los costos de producción de bienes de salud y donde la cobertura sanitaria es prácticamente total, la farmacoeconomía podrá sin duda ayudar a mejorar la toma de decisiones clínicas, sobre todo cuando se debe escoger entre varios tratamientos similares. Todo ejercicio, sin embargo, debe estar enfocado en la perspectiva, no solo de controlar costos sino de mejorar la eficiencia (Evans, 1992) para alcanzar la equidad en el acceso a los servicios de salud. En los países en desarrollo, donde una parte importante de la población no tiene acceso a medicamentos y donde muchas personas mueren a causa de enfermedades para las cuales existen medicamentos preventivos, la farmacoeconomía tendrá un enfoque y unas características muy diferentes. Más que contención de costos, se buscará racionalizar los recursos existentes y conseguir fuentes suplementarias de financiamiento, de tal forma que garantice la extensión de la cobertura a toda la población (Velázquez, 1999). Para estos países, la evaluación económica del medicamento debe enmarcarse en un análisis macroeconómico que aborde el problema de los recursos disponibles, con frecuencia limitados, en relación con las necesidades globales. Una farmacoeconomía de este tipo estaría muchísimo más centrada en la selección de fármacos, y la evaluación econó mica del medicamento sería también un elemento más para promover lo que la OMS ha llamado, el uso racional del medicamento (Velázquez, 1999)