SEGUIR CREYENDO
Todos creemos en el Vive porque sabemos que será una oportunidad para ver a nuestros artistas favoritos; cantaremos y bailaremos hasta agotar nuestras energías.
También porque sabemos que será cómplice de un grandioso fin de semana con la familia, los amigos y la música que nos gusta. Pero muchos creemos en él porque sabemos que vamos a descubrir música nueva.
La música nueva es una fuente inagotable de ideas y talentos frescos; todos afectados por el contexto presente y pasado bajo el que nacieron.
Tratar de que una banda nueva responda al mismo contexto que respondían hace 19 años es una locura. La nostalgia cobija nuestros más íntimos recuerdos; pero creo que también puede cobijar nuestras más íntimas expectativas y hacernos creer que el mejor recuerdo está por venir.
Cómo olvidar aquellas primeras presentaciones de “bandas nuevas” como lo fueron en algún momento Porter, Austin TV, Quiero Club, Hello Seahorse!, División Minúscula, por mencionar algunas. Presentaciones que sirvieron para consolidar a estas bandas en nuestro recuerdo, cobijarlas con nuestra nostalgia y hoy tenerlas como nuestras favoritas. Pero para que esto pasara, el Vive tuvo que creer en ellas y así, nosotros haríamos lo mismo.
El año pasado, el Vive creyó en artistas como LNG/SHT, un proyecto independiente con apenas un par de años de trabajo formal pero notorio. En respuesta, sus cientos de fanáticos, algunos escépticos y otros que llegaban por casualidad a esa carpa, abarrotaron la presentación y quedaron marcados; de esas marcas que el paso del tiempo las hará imborrables. Otro ejemplo es Little Jesus. El Vive creyó en ellos y siguiendo más o menos los mismos factores, tuvieron una presentación inverosímil en la edición pasada.
Como festival, el Vive Latino tiene que seguir creyendo y apostando por la música nueva e independiente. Tiene que voltear a ver a esos artistas que sin un sello trasnacional en sus discos, venden miles de copias, abarrotan cientos de foros, viajan por toda la república (y más allá) y despiertan el interés de miles de personas; esto con el gran mérito de ser independientes. Bandas que obedecen a las generaciones que forman parte de un nuevo contexto.
Me da mucho gusto encontrar nombres como el de Vaya Futuro y Los Blenders en esta edición, pues estoy seguro que algo mágico y digno del recuerdo está por pasar. Creo fielmente que estas presentaciones abarrotadas de artistas a los que poco se les apuesta en los medios de comunicación masivos, no pasan desapercibidas para los organizadores del Vive Latino.
Como público, tenemos que seguir creyendo en la música hecha en México. Tenemos que seguir creyendo en los talentos independientes. Tenemos que seguir creyendo en el Vive Latino. Tenemos que seguir creyendo que lo mejor está por descubrirse.
Alan Zuko
Alan es el locutor del Oasis.mx
En 2017 conujo el FB Live de las redes del Festival
7