Falmed Edición Especial 02: Emoción y Razón | Page 7

MEDICINA ASERTIVA 7 FalmedEduca E l fenómeno mundial de judicialización de la medicina y el llamado permanentemente reali- zado por el Colegio Médico de Chile y su Fundación de Asistencia Legal, Falmed, tendiente al desarrollo de una práctica médica apegada a la lex artis, la bioética, la medicina asertiva y la seguridad médica; ha puesto también frente a frente a dos fenómenos sociales de la medicina que vale la pena analizar. Uno de ellos, es la llama- da medicina defensiva, concepto que fue acuñado en 1978, por el destacado médico psiquiatra nor- teamericano, Laurence Tancredi, profesor clínico de Psiquiatría de la Universidad de Nueva York, quien además, ha sido autor de di- versas publicaciones de Derecho y Psiquiatría, destacando su obra Dangerous Diagnostic: The Social Power Of Biological Information, pu- blicada en 1994 en la University Of Chicago Press. Un estudio de la om- nipresencia de las pruebas diagnós- ticas y del potencial que ofrece a las instituciones para clasificar, catego- rizar y, en última instancia, controlar a los pacientes. En sus trabajos, el Dr. Tancredi establece, a modo de re- sumen, que “la medicina defensiva no es más que el empleo de proce- dimientos diagnóstico-terapéuticos con el propósito explícito de evitar demandas por mala práctica”. Sin embargo, cabe mencio- nar que también existen dos acep- ciones del concepto de medicina defensiva, una positiva y otra nega- tiva, desarrolladas por el investiga- dor David. M. Studdert, en su estudio Defensive Medicine Among High-Risk Specialist Physicians in a Volatile Malpractice Environment, publicado en Estados Unidos. Según Studdert, la medici- na defensiva positiva, consiste en adoptar un exceso de medidas de seguridad mediante cuidados su- plementarios (exceso en el uso de tecnologías, exámenes, estudios, referencias innecesarias y en el nú- mero de interconsultas.) Asimismo, la segunda de- finición de medicina defensiva de Studdert, en Norteamérica, apunta a un fenómeno que nadie desea, como es la medicina defensiva negativa u omisiva, siendo esta última, en la que existe el riesgo que los médicos abandonen su ejercicio profesional, o se aparten de situaciones conflic- tivas o de alto riesgo de litigio. Este tipo de medicina de- fensiva negativa, produce diversas problemáticas; como son el retardo en la toma de decisiones en las ac- tividades diarias, como postergar la atención del enfermo para los tur- nos subsecuentes, especialmente en los casos de enfermos complica- dos, o con familiares demandantes, situación que de producirse, puede afectar de manera importante la salud del enfermo, ya que diferir la atención muchas veces conlleva la progresión de la enfermedad a es- tadios irreversibles. Irónicamente, podemos de- cir que en general, según los autores norteamericanos de este concepto, la medicina defensiva exacerba el problema que se trataba de resol- ver, como es la judicialización, y en lugar de proteger al médico de una posible demanda, crea un clima de inseguridad, desconfianza y provo- cación, en el cual las demandas ocu- rren más a menudo. El Dr. Miguel Umaña, médico coordinador del Centro de Estudios, Jurisprudencia y Educación de FALMED (CEJEF), advierte que hoy Chile se encuentra en una situación intermedia en materia de judiciali- zación, lo que afortunadamente aún no alcanza los niveles existentes en Estados Unidos y las complicacio- nes económicas propias de la medi- cina defensiva negativa. “Hoy nuestro país presenta un contexto con un paciente más litigante, que usa redes sociales y que exige por distintas vías un mé- dico acogedor. Este nuevo paciente busca que se le brinde una solución rápida y efectiv a a su enfermedad y que incluso se le permita participar en la toma de decisiones diagnósti- cas y terapéuticas. Lo que presenta complejidades”, argumenta el Dr. Umaña. El presidende de Falmed, Dr. Sergio Rojas, coincide en el pun- to “Lo que el paciente hoy quiere de su médico, no es sólo un facultativo moderno, especializado, que utili- za buena tecnología de punta, sino que en el fondo, la población espera contar con médicos comprometidos con sus pacientes, cercanos y hu- manos. Un nuevo médico del Siglo XXI, que no sea sólo tecnología, sino que recupere y mantenga recursos de comunicación y diálogo, que per- mitan sentir al paciente, que su mé- dico se preocupa y se interesa por él y su enfermedad, y que también lo escucha con respeto sobre sus pro- blemas existenciales, psicológicos, sociales y familiares, derivados de su padecimiento”. Por esto el dirigente plan- tea que “Falmed desarrolla una labor tendiente a la medicina asertiva, que se encuentra basa- da en una preparación médica só- lida, con actualización constante, utilizando estrategias de comuni- cación, que fortalezcan la relación médico-paciente y la confianza mutua, con conocimiento jurídico de sus derechos, tanto como los derechos de los pacientes y ve- lando por que éstos se cumplan y se respeten”, enfatizó. Medicina asertiva es abor- dar al paciente desde la ciencia y la humanidad. Este es el enfo- que que exploramos en este pri- mer segmento de Revista Falmed Educa Especial 2.