EΣTI EΣTI | Page 11

11 195 Sube ahora el mar por el río Ensuciando su desembocadura y la precaria humedad fontanal Llena de mosquitos brinda una ocasión para maldecir Mas no para lamentar la avaricia de las nubes que no están Preñadas sobre los tejados gregarios y falseadores 200 ¡Quedan lejos las estaciones! Una boca ha comenzado a balbucir como una vagina dentada Que pare torpemente pasado y porvenir Otras articularán rítmicas secuencias sonoras alumbrando Los hechos singulares ¡oh arrullo! 205 Incierto bálsamo para las heridas prehistóricas El rapsoda confía al sacerdote los trenos Y en la parte más alta y firme de la tierra Los cortejos plañideros tratan de preservar los restos No es sitio para el hombre donde crece el papiro 210 Aunque la memoria sea su lugar: Códigos legales grabados en piedra Registros ciudadanos en la piel de oveja ácida y reseca Rollos y libros e información que corre a la velocidad de la luz Bibliotecas que fueron como sinapsis neuronales 215 Muestras arqueológicas o museos interminables llenos de polvo Sobre su propio estiércol rumian los dioses de curvados cuernos Junto a las cabras doradas que esperan al pastor en su redil Declina el fuego dando un respiro A los campos salados de paupérrimo esquilmo