ESPACIOS
Tras su discreta entrada , propia de un prudente y chic servicio a la francesa , como sus hermanos mayores , los hoteles Relais Christine y Saint James Paris , nos topamos con un coqueto rincón ornado con una gran lámpara caramelo con cientos de cristales de Murano realizada a medida para el hotel . Un poco más allá , en el suelo de tomettes terracota realizadas por un artesano español y las alfombras persas con pátina , alternan asientos de lana bouclé y terciopelo de diferentes cromáticas , y butacas con flecos ( ataviadas de tiros largos ).
GASTRONOMÍA
El restaurante OMA ( mamá en coreano ), que ha trasladado al hotel los fogones de su reputada dirección parisina , recrea rincones de clima aterciopelado que mezclan con ritmo exquisitas piezas con referencias rústicas y muebles de aire vintage que combinan sin combinar .
Su menú se abstiene del tradicional croque monsieur o los escargots en persillade servidos en cocottes Staub . Lejos de ello , Ji- Hye Park refleja el espíritu de su cocina a través de recetas sencillas , sabrosas , equilibradas y generosas , inspiradas en su infancia coreana . Así el empleo tanto de picantes y fermentaciones , como de crema y queso , son un puente entre Corea y Francia .
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