no llores. No voy a decirle que no a escuches canciones tristes o veas
películas tristes. No voy a decirle que no comas helado.
Lo que voy a decirte es que todas estas cosas deben hacerse con
moderación.
No hay nada inherentemente malo en sentir lo que estás sintiendo en
estos momentos. Se convierte en un problema, sin embargo, cuando se
elige revolcarse en estos sentimientos durante mucho tiempo. Lo que
tenemos que hacer en su lugar es experimentar el dolor que estamos
atravesando en lugar de evitarlo, pero siempre asegúrate de que estamos
al mismo tiempo haciendo camino a través del dolor para llegar finalmente
a un lugar más feliz, y más saludable.
Hay muchos recursos que se pueden utilizar para ayudarte a hacer frente
a los tipos de dificultades a los que estás pasando en estos momentos.
Vamos a ir a través de todos ellos en este libro, desde hacer actividades
que disfrutes para alejarte de tus problemas por un rato, hasta pasar
tiempo con amigas que puedan recordarte quién eres en realidad, y
ayudarle a sentirte mejor contigo misma.
Hay ciertos recursos que se te pueden ocurrir a ti sola, o que otros pueden
sugerirte.
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