Toda revolución tecnológica coincide con cambios en lo que significa ser humano, en el tipo de fronteras psicológicas que separan la vida interior del mundo exterior.
Los cambios en la sensibilidad y la conciencia nunca se corresponden exactamente con los cambios en la tecnología, y muchos aspectos del actual mundo digital ya se estaban formando antes de la era de la computadora personal y el Smartphone. Sin embargo, la revolución digital incrementó de pronto el ritmo y la escala del cambio en la vida de casi todo el mundo.
Cuando el Smartphone recibe mensajes, alertas y notificaciones que invitan a una respuesta instantánea la noción del tiempo de todo el mundo cambia, y la atención que solía centrarse de manera más o menos distante.