Esa fue la primera vez que sentí mi corazón golpearme en el pecho . Y nada detenía mi dolor , el dolor ciego , el golpe con el puño al pecho . Cada latido … un paso hacía mi calvario . Las lágrimas , ¿ de qué valen ? El llanto seco duele más . Ni todas mis palabras pueden explicarlo .
Y pasó el tiempo .
Embarazo . Nunca desee con tantas ganas que esa perra perdiera su bebé .
Era una niña egoísta , ya lo sé .
Detengamos esta historia aquí . Si me conoces , sabes lo que pasó después . Llámame loca … malnacida como suelen hacerlo ...
Zamna Carrillo