de 1896. Sus calles fueron denominadas Aconcagua, Amazonas, Bermejo, Guayaquil, Orinoco, Pilcomayo, Rio de la Plata y Rímac, nombres, que en su mayoría, se conservan aún.
El Molino de Pérez
Un hito histórico del barrio, es una de las construcciones más antigua de Montevideo. El edificio del molino se construyó en dos etapas, la primera entre 1780 y 1790 y la segunda en 1835 cuando fue adquirido por Juan María Pérez para convertirlo en molino hidráulico, sobre el arroyo Malvín. Comenzó a funcionar en 1840 y estuvo en actividad hasta el año 1895, cuando se averió el mecanismo de la rueda debido a las fuertes lluvias. Desde entonces se utilizó como lugar de descanso. En 1956 la Intendencia de Montevideo realizó una restauración de la rueda. En 1961 se instaló el Museo Pedro
El Molino de Pérez fue declarado Patrimonio Histórico. El Molino está enclavado en el Parque Baroffio y ha tenido usos disimiles, según la concesión de turno, primero fue la Asociación de Pintores y Escultores del Uruguay y luego Museo Vivo de la alimentación.
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Figari, que reunía gran parte de las obras del pintor, pero posteriormente fue abandonado. Entre 1998 y 1999 se realizó una nueva restauración.
Las torres del aero carril
Los barrios recostados a la costa y que tienen la playa a sus pies, son barrios especiales ya que se pueden considerar balnearios y trascienden a sus moradores pues en temporada estival son visitados por el resto de los montevideanos, por eso los hitos de sus playas y su rambla son los que más se conocen. Siempre recuerdo, en mis años juveniles, cuando iba llegando a esa playa, que resaltaban en el paisaje las enormes torres del famoso y frustrado aero carril que estaban ubicadas, una en las rocas del descanso que une la playa brava con la mansa, y la otra en la isla de las Gaviotas, enfrentadas ambas entre sí.
Fue durante la intendencia de German Barbato que se comenzó a construir un ambicioso proyecto que convertiría a la isla de las Gaviotas en un polo turístico de primer nivel. El proyecto consistía en un aero carril que llevaría la gente desde la costa hasta la isla, donde se iba a construir un gran restaurante rodeado de hermosos jardines y los turistas podrían almorzar con una muy buena vista hacia la costa. El proyecto se abandonó porque, al parecer, hubo un error de cálculo, y el aero carril al llegar a la mitad del trayecto, prácticamente, se hundiría en las aguas del Rio de la Plata. Las torres estuvieron muchos años dominando el paisaje, hasta que fueron dinamitadas, en el año 1973, destruyéndose así uno de esos verdaderos“ monumentos al fracaso”.