El sueño de una sombra PREVIA | Page 22

22 Alexandra Di Stefano Pironti
Parece que él tuvo mucha suerte en el amor , ya que su risa de niño travieso y su temperamento directo y sincero enamoró a la inocente Julia . No en balde , al pintor le habían descrito muchas veces como un niño grande que estaba más cómodo con los chiquillos , para los que siempre tenía preparada una palabra amable , que con los adultos , a quienes solía molestar terriblemente su franqueza .
De hecho , a los que su manera de ser incomodó sobradamente fue a los críticos de arte , especie a la que Papá Eliseo detestaba . No hay nada que describa mejor lo que pensaba sobre ellos que ese dibujo al carbón , colgado en las paredes de mi casa , en el que aparecen cuatro críticos de la época vestidos con traje de etiqueta y con cabezas de burro . Pero como la crítica de arte en aquel tiempo podía ser tan cruel con su pluma como él con sus palabras y sus dibujos , unos acusaron a papá de pintar de memoria , en vez de salir a pintar al natural , y otros de no tener un estudio adecuado para un pintor . La respuesta de Papá Eliseo a estas acusaciones no se hizo esperar y pintó un cuadro que tituló Mi estudio , en el que se le ve a él dentro de una barca pintando con su caballete en medio del mar .
—¿ Para qué necesito un estudio ? Yo no pinto en casa . Eso para los que pintan retratos o naturaleza muerta o bailes de trajes o fotos iluminadas . Yo trabajo en la calle , en la playa , en el campo … Esos son mis estudios – contestó papá a sus detractores .
Las crónicas de la época describen a papá como una persona con demasiado genio y grandes dosis de arrogancia , pero él lo daba todo en el amor . Por eso , no pudo aceptar que su enamorada , Mamá Julia , huyese cuando , abrumada por su propia situación en una época en la que el matrimonio era sagrado e indisoluble para la Iglesia católica – y estaba claro que Papá