el newsletter de la camada 87 septiembre 2013 | Page 12

¿Valió la pena el esfuerzo? Por supuesto: habían dedicado la carrera a una amiga en común que está luchando contra un cáncer desde hace tres años. Ese era el motivo importante, iba más allá de la carrera, que completaron cuando muchos otros abandonaron."  " “Para ser dos elefantes de 96 kilos, sin entrenamiento, estuvo bien. El ganador hizo cinco horas y media. Una persona normal, bien entrenada, lo cubre entre seis y siete horas y media. Pero lo espectacular fue que nos propusimos hacerlo, y que lo logramos, sin renunciar. Con mucho viento, mucho frío, pero con el rosario y el objetivo claro”, concluye Cano. Que nunca, en ningún momento, pensó en renunciar. Cano y Fede, al momento de llegar.