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SAPO EN MAR DEL PLATA

Había una vez un sapo que se fue a Mar del Plata a conocer a sus abuelos. Llegó y fue con ellos a comer una pizza, después fueron a pasear y a un barco.

Más tarde dijo don sapo: - Me voy a trabajar – y se fue, porque sus abuelos eran pobres.

Cuando don sapo volvió de trabajar, algo apareció en la niebla. Don sapo se asustó tanto que se fue corriendo.

Al día siguiente don sapo dijo que vio algo como un monstruo, pero nadie le hizo caso.

-¿Por qué nadie me cree? – preguntó el sapo.

-Es que el monstruo que pensás que viste, en realidad es un muñeco de arena – le explicaron los abuelos.

Luego de escuchar eso, el sapo se rio y dejó de tener miedo.

A la noche todos hicieron una cena, comieron y vivieron felices para siempre.

Mati – Dareks

EL SAPO SUS AVENTURAS

El sapo se fue a Corrientes y volvió al Chaco. Al volver, se encontró con el bicho colorado, con el ñandú, el yaguareté y mil animales más.

Cuando el sapo se bajó de lomo del yacaré, el bicho colorado le dice: - ¡Qué bueno que hayas vuelto, mi querido amigo!

Y el sapo les dice a sus amigos que conoció Corrientes y se encontró con distintas cosas. Muchos animales, muchos campos y playa. Y que también conoció otros amigos.

En uno de los campos – contaba el sapo – vi una clase de máquina que cortaba madera y que cortaba pasto, árboles y flores. Y había otra máquina que construía casas, escuelas, calles y muchas cosas más.

El sapo continuó contando: - Cuando yo estaba en Corrientes tuve un amigo que a los tres meses tuvo que irse…

¿Y cuándo nos va a contar como siguió esa historia? – preguntó el bicho colorado –

Y… ahora ya es de noche – respondió el sapo – mañana les contaré más de Corrientes.

Uriel – Luana