El Junquito y sus lugares turísticos Revista | Page 12
entonces y hasta la fecha, Macarao
ha resistido todas las presiones
urbanísticas y ambientales que el
crecimiento violento de Caracas
impuso en todo el valle en el que se
ubica y ha logrado mantenerse en un
magnífico estado de conservación.
A pesar de esta situación favorable,
de las importantes funciones que venía
cumpliendo como Bosque Nacional y
del hecho de estar bajo la tutela del
Estado, la zona de Macarao estuvo
expuesta, al comienzo de la presente
década, a una fortísima presión
provocada por la expansión del área
urbanizada de Caracas. Algunos
organismos oficiales propusieron que
en parte de estos terrenos protegidos,
se permitiera la construcción de
viviendas multifamiliares.
Sin embargo, sus antecedentes de
zona protegida y de Bosque
Nacional, la revalorización de sus
recursos hidrológicos por una
necesidad cada día mayor de agua
del acueducto de Caracas, y la
presencia de ruinas históricas,
fundamentaron la solicitud de que la
zona fuera convertida en una
reserva biológica o en un Parque
Nacional, con lo cual quedaría
asegurada su protección de una
manera permanente.
A finales del año 1973, el
Gobierno Nacional dispuso la
creación del Parque Nacional
Macarao, mediante el Decreto N.º
1.529 de fecha 5 de diciembre. El
área afectada comprende una
extensión de 15.000 Ha. de terreno,
situado
en
jurisdicción
del
Municipio Libertador del Distrito
Federal y del Municipio San Pedro,
del Estado Miranda.
La existencia del Parque
Nacional Macarao se justifica
esencialmente por su condición de
zona protectora de recursos
hidráulicos, cuyo aprovechamiento
contribuye
a
satisfacer
las
necesidades de Caracas. EL Decreto
Ejecutivo Nº 1.046 de junio de
1792, que creó el llamado Cinturón
Verde de Caracas e incorporó la
zona protegida de Macarao,
contribuyó mucho a la decisión de