El-insomnio-de-Oriana teaser | Page 24

puedo hacerlo sin sentir remordimiento alguno por el tiempo o las personas que pierdo. Por ejemplo, por fin pude dejar atrás a mis amigos de la niñez, aquellos que de pequeño me empujaron a los malos hábitos y que seguía conservando sin saber por qué. Ahora no tengo amigos pero estoy bien. Cada vez estoy más seguro de mis decisiones. Ahora ya no me hago tantas preguntas como antes y cojo la mejor opción. Huyo de las situaciones por aburrimiento o incomodidad porque nada me ata. En este supermercado, todo el mundo es normal. Y con normal me refiero a que sus comportamientos son fáciles de estudiar. Es mi primer día y ya he podido comprobar que mi compañero de sección no se ha duchado en la última semana. Elena almuerza a las diez y media, ni un segundo más ni un segundo menos. Cuando se aproxima la hora, no deja de mirar el reloj para controlar que es puntual. Oriana es una de las que no me ha respondido a los buenos días. Todos siguen pautas diferentes, aunque igual de acentuadas, así que supongo que no tardaré en descubrirlas. Elena va muy guapa, tanto que seguro que se ha arreglado para ella misma. Lleva el cabello rubio cuidadosamente peinado y sombra de ojos. Es capaz de trabajar mientras sonríe, así que empiezo a pensar que esa es la expresión natural de su rostro. Eso me hace desconfiar de ella. No sabré cuándo sonríe de verdad. Solo cambió el gesto cuando entró Oriana en la sala. No me sorprende. No tiene muy buena cara. Está pálida y tiene ojeras. No debe comer ni dormir bien. De todas formas, se ha puesto eyeliner. Trabaja bien aunque parece que tenga mucha carga. En el descanso, come sola, aunque Elena le ofrece sentarse con ella. Lo cierto es que Oriana me parece muy familiar, pero no la identifico. Debe parecerse a alguien que conozco o tener una 24