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Microencapsulación (M, 2010):
Se trata de un aislamiento de ingredientes que pueden interaccionar con otros componentes alimentarios, enzimas y células en pequeños dispositivos recubiertos con un material que puede ser un polímero, una macromolécula o un lípido, protegen contra el calor, humedad, luz, oxígeno, etc.
Las ventajas de esta tecnología son:
Modifican las características físicas del alimento y esto facilita su manipulación.
Incrementan la estabilidad del producto
Retiene ingredientes volátiles como el aroma
Enmascara sabores desagradables
Aumenta la bio-disponibilidad de nutrientes.
Micro partículas (M, 2010):
Consiste en vesículas sólidas minúsculas (entre 1 y 1000 µm), de constituidas a base de lípidos, polímeros sintéticos y macromoléculas de origen natural.
Las ventajas de esta tecnología son:
Es biodegradable
Es Inerte tanto durante el proceso como durante el almacenamiento
Es Manipulable
Su Material es económico y de grado alimenticio
Imagen química (Microsoft Dynamics):
Este avance tecnológico tiene como fin garantizar la seguridad y la calidad de los alimentos, por medio de la inspección por este medio se conocerá la composición del producto en el momento en que está siendo procesado en la línea de producción elevando los niveles de calidad y seguridad. Esta tecnología permite mejorar la detección de cuerpos contaminantes a través de técnicas basadas en la inspección espectral.
Las ventajas de esta tecnología son:
Analiza al instante la composición química de un alimento
Muestra el análisis en mapas gráficos del producto lo relacionado con humedad, fibra, grasa, etc, lo que permite seleccionar los productos correctos y material extraño en la línea de producción.
Bacteriófagos (Martinez Vicedo, 2016):
Como su nombre lo indican son virus que se comen a las bacterias, se consideran una alternativa biotecnológica aplicada a la industria de alimentos, se han realizado pruebas para el control del E.coli, Salmonella y Listeria monocytogenes con excelentes resultados.
Las ventajas de esta tecnología
Se utilizan para higienizar la descontaminación de productos frescos (frutas, carnes y verduras)
Para desinfectar superficies o equipos que tienen contacto con alimentos
Para alargar la vida útil de productos naturales perecederos como biocontrol.