Al cual evitaron gracias a los poderes del hechicero; pronto se sintieron a salvo y descendieron del barco; todo estaba muy nublado y silencioso en aquella isla, el hechicero avanzó con toda su tripulación pero pronto notaron que había algo muy extraño, algo que se movía dentro de los arbustos. Pero cuando fueron a revisar era un tierno conejo que tenía oculto dentro de su pelaje un pequeño basilisco el cual devoró a dos de los tripulantes. El hechicero no podía dejarse ver del basilisco porque moriría envenenado, por ello salió a correr con el resto de su tripulación.
A medida que iban avanzando la claridad del día los abrazaba, pero ellos sentían mucha hambre y cansancio. De repente escucharon una misteriosa voz que los invitaba a comer de un fruto de los arbustos.
Cuando miraron los arbustos vieron n deliciosas frutas y justo al lado había una grande y hermosa flor. Solo tres de los tripulantes sintieron ganas de comer de los frutos. Y de un momento a otro, la flor se los comió. El hechicero advirtió al resto de los tripulantes, sobre los peligros de la isla y de esta manera siguieron avanzando.Misteriosamente apareció un hermoso río en el cual habían unas sirenas, los tripulantes fascinados por sus cantos se ahogaron all. tripulantes murieron. alsorprendente paso.