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Ciudad de México / Mayo 31, 2020.
O el seguro acelera su digitalización o la
oportunidad de evolucionar se perderá
#Insurtech #Seguros
Marcos Medina
@MmedinaMarcos
La irrupción de la COVID-19 generó que muchas aseguradoras
modificaran sus procesos operativos; no obstante,
de poco servirán las medidas de continuidad de negocio
instrumentadas si una vez que se mitigue la diseminación del
SARS-CoV-2 dichas instituciones no aceleran su digitalización y
aumentan su apetito de innovación, pues tal omisión ocasionaría
que se desaproveche la oportunidad de que el seguro evolucione
en el país.
Coincidieron en señalar lo anterior Jesús Hernández, CEO
de WeeCompany; Eva Sander, Cofounder de Zenda.la; Omar
López, presidente de la Asociación Insurtech México (AIM); y
Angélica Speich, directora comercial en Puntolab, durante su
participación en una mesa de discusión vía Zoom Video denominada
Beyond, organizada por el periódico El Asegurador.
Al tomar la palabra, Hernández indicó que aquellas aseguradoras
que tras la COVID-19 tengan la agilidad de entender cómo
funciona la “nueva normalidad” en el mundo de los productos, los
servicios y la previsión financiera tomarán ventaja y despuntarán
frente a otros competidores. Destacó asimismo que el evento pandémico
ocasionó que procesos que no eran prioritarios, como la
digitalización, se aceleraran considerablemente.
“El episodio sanitario aceleró o forzó
la transformación digital. La evolución
ha sido tan drástica que hoy en día el
sector asegurador logró un progreso que
se habría alcanzado en al
menos cinco años. En tal
sentido, la digitalización
dejó de ser uno de los
planes estratégicos menos
importantes en el
seno de las instituciones
de seguros para llegar a
considerarse como una
prioridad obligatoria”,
explicó Hernández.
El funcionario de
WeeCompany apuntó
que el sector asegurador
no ha sabido escuchar las necesidades
de los usuarios; por ello, añadió, los instrumentos
que se comercializan siguen
siendo preocupantemente sofisticados.
Frente a la realidad anteriormente
descrita, Hernández consideró vital que
la industria aseguradora aprecie la CO-
VID-19 como un punto de inflexión que
le permita no solo apostar por metodologías
como la innovación, sino también
empezar a caminar con paso firme hacia
la tan ansiada evolución que debe asumir
el sector financiero de México.
“En la actualidad, pensar en la transformación
digital, escuchar al consumidor
y ayudar a la población a regresar
paulatinamente a la vida cotidiana
se perfila como la misión principal que
debe trazarse el sector asegurador mexicano”,
abundó Hernández.
Modificar modelos de
negocio vale la pena
Por su parte, Sander apuntó que existen
muchos ejemplos que confirman
que apostar por la innovación de los modelos
de negocio tradicionales provoca
que la rentabilidad de una organización
experimente un crecimiento exponencial.
En seguros, dijo, dicha ecuación
El sector debe
aprovechar
la nueva era
de consumo
para dejar de
comercializar
coberturas
sofisticadas
también funciona.
“Si en el sector no somos capaces de
luchar contra los miedos, prejuicios y la
cultura corporativa tradicional, básicamente
continuaremos
desarrollando productos
y servicios desenfocados
y, peor aún, seguiremos
sin dar respuesta a lo
que realmente necesita
el usuario financiero”,
destacó la Cofounder de
Zenda.la.
Según Sander, las aseguradoras
deben tener la
agilidad de generar coberturas
que solucionen
problemas de la vida cotidiana
de la población desde el punto de
vista de la administración de riesgos y la
prevención. Puntualizó además que el
enfoque comercial y técnico en el sector
debe cambiar si realmente se apunta a
que el consumidor alcance una resiliencia
financiera y social muy superior a la
tradicional.
La directiva de Zenda.la subrayó que
la digitalización obligatoria que provocó
la emergencia sanitaria de la COVID-19
está modificando profundamente la
forma en que la sociedad interactúa
y se comporta, sin perder de vista que
también ha alterado la manera en que
se adquieren productos y se obtiene información.
Sander pronosticó que las empresas
que no se suban a la ola de lo que calificó
como “la nueva economía”, la cual tiene
como característica esencial su marcado
compromiso social, sufrirán un revés reputacional
y financiero en el corto plazo,
puesto que la sociedad hoy en día exige
de las marcas valores como la empatía,
la buena voluntad y la colaboración.
“La industria de seguros debe enfocarse
en el diseño de una propuesta de
valor que no tenga como piedra angular
simplemente generar enriquecimiento
monetario, por lo que habría que apostar
por procesos que ayuden a distribuir
coberturas que incrementen la resiliencia
y la protección financiera, ya que en
épocas de crisis ayudar a la población es
un aspecto muy valorado. En concreto,
el sector se enfrenta a la posibilidad de
edificar un futuro diferente, y el ecosistema
insurtech puede aportar su grano
de arena para que el crecimiento sea
realmente exponencial”, amplió Sander.
Urge una nueva cultura
Al tomar la palabra, López afirmó
que el secreto que generará la metamorfosis
en el seguro estriba en la mentalidad
y cultura que adopten los departamentos
técnicos y comerciales de las
aseguradoras.
El presidente de la AIM especificó
que la evolución del sector seguros en
México depende en gran medida de que
todos los miembros de la cadena de valor
de la industria realmente escuchen
los pensamientos, las inquietudes, las
dudas y las exigencias más apremiantes
de la población en lo que se refiere a protección
patrimonial. Agregó que es imperativo
centrar esfuerzos en el descubrimiento
de las nuevas necesidades de
los consumidores una vez que se disipe
el SARS-CoV-2.
“El ejercicio que se debe realizar debe
tener como fundamento primordial la
imaginación; por ello, es recomendable
que tanto áreas técnicas como comerciales
imaginen cómo sería el viaje ideal
De no crearse nuevas culturas organizacionales,
las aseguradoras continuarán diseñando
coberturas desenfocadas
en seguros; esto es, desarrollar un nuevo
proceso que empiece desde la prospección
y culmine en la reclamación. Estoy
convencido de que, si se cuestiona
la forma en la que opera actualmente el
sector, la experiencia de consumo evolucionará,
y las ventas serán simplemente
una consecuencia espontánea, natural”,
declaró López.
Por un nuevo lema sectorial
En su intervención, Speich sostuvo
que predecir y prevenir tendría que
ser el nuevo lema del sector asegurador
para que su operación cambie.
La directora comercial de Puntolab
afirmó que el sector debe dejar solo de
analizar la forma en que debe mejorar
la experiencia de consumo digital; por
esa razón, alertó, en caso de que luego
de la pandemia se mantenga dicha tendencia
de solo diagnosticar sus áreas de
oportunidad, se correrá el riesgo de que
los diversos competidores devengan en
empresas irrelevantes.
Para finalizar, Speich reconoció que
son pocas las esperanzas de que en el
seno del sector asegurador emerja una
nueva personalidad empresarial y corporativa
si no se analiza a profundidad
las nuevas tendencias de consumo, una
aspiración que puede lograrse por medio
de disrupciones como el big data.
“La inercia en el sector asegurador
parece ser mucho más grande de lo que
se piensa; entonces las aseguradoras
tendrían que ser conscientes de que a
la población no le importarán mucho
nuestras soluciones si sus problemas
no se solventan basándose en ellas. En
síntesis, las instituciones tradicionales
en colaboración con los competidores
digitales no convencionales tienen que
empezar a probar nuevas cosas, de tal
manera que tomen decisiones basadas
en la data para que irrumpan sin obstáculo
nuevos modelos de negocio”, concluyó
Speich.