Ciudad de México / Mayo 15, 2020. 13
Progreso tecnocientífico y crisis moldearán
profundamente el entorno laboral
La pandemia de COVID-19 y la consecuente incertidumbre económica están cambiando la forma en que
las organizaciones de todo el mundo trabajan hoy y trabajarán en el futuro cercano. Especialmente en
momentos difíciles, los principales empleadores se están enfocando en su fuerza laboral, en particular
fomentando estilos de vida saludables, apoyando el bienestar económico y proporcionando habilidades y capacitación
a medida que cambian las carreras profesionales debido a la introducción de la inteligencia artificial y
los avances tecnológicos en el universo del trabajo.
Así lo establece el estudio Tendencias globales de talento
2020, difundido por Mercer (subsidiaria de Marsh),
el cual revela que 34 por ciento de los empleados
prevé que sus puestos de trabajo serán reemplazados en
los próximos tres años; 61 por ciento de ellos cree que
sus empleadores los están preparando para el futuro del
trabajo, y 55 por ciento de los encuestados confía en que
su organización los capacitará en nuevas habilidades en
caso de que su puesto cambie como consecuencia de la
automatización.
Es decir, a medida que los empleadores se transforman
para abordar estas cuestiones deben reconsiderar
el propósito de su compañía y sus responsabilidades
frente a los empleados y respecto a los futuros ingresos
de éstos. Y deben hacerlo mientras se enfrentan a
desafíos imprevistos, como la pandemia de COVID-19
y un debilitamiento económico inminente que podría
obstaculizar la adopción de nuevas estrategias de reclutamiento
de capital humano.
Al respecto, Ilya Bonic, presidente de la Práctica de
Career y director de Estrategia de Mercer, afirmó: “Es
importante encontrar un equilibrio entre lo económico
y la empatía que debemos mostrar en todas las decisiones
relacionadas con las personas, sobre todo ahora
que nos enfrentamos a los interrogantes, las preocupaciones
y la incertidumbre de una pandemia global. Las
organizaciones necesitan tener un modelo financiero y
una mentalidad cultural que les permitan prepararse
para el futuro e invertir en él”.
En tal sentido, el estudio de Mercer identifica cuatro
tendencias para este año 2020. Se presentan a
continuación.
Centrarse en el futuro: trabajar en conjunto para
garantizar que las personas prosperen ahora y en el
futuro. Si bien 61 por ciento de los empleados confía
en que su empleador los preparará para el futuro del
trabajo, 63 por ciento de ellos se siente en riesgo de sufrir
desgaste profesional o burnout. Las oportunidades
profesionales se han reducido, ya que 72 por ciento de
los trabajadores experimentados afirma que planea trabajar
después de la edad de
jubilación; y 55 por ciento de
los trabajadores de la generación
X asegura que las oportunidades
de progreso son
limitadas debido a su avanzada
edad.
Carrera hacia la capacitación
en nuevas habilidades:
A pesar de que 78
por ciento de los empleados
asegura que están preparados
para aprender nuevas
habilidades, 38 por ciento de
#DesarrolloHumano
ellos afirma que no dispone de tiempo suficiente para
capacitarse. Además, solo 34 por ciento de los líderes
de Recursos Humanos está invirtiendo en aprendizaje
y capacitación de su fuerza laboral como parte de su
estrategia para prepararse para el futuro del trabajo. Un
dato por demás significativo es que 40 por ciento de estos
líderes no conoce las habilidades que tiene su fuerza
laboral en la actualidad.
Armonizar las acciones con la ciencia: ver más
allá mediante el aumento de la inteligencia artificial,
pero con intuición humana. Sin embargo, solo 43 por
ciento de las organizaciones utiliza métricas para identificar
a los empleados que probablemente abandonen
la compañía; 41 por ciento sabe cuándo es probable
que se jubile el talento crítico; 18 por ciento conoce el
efecto de las estrategias salariales en el desempeño; 15
por ciento puede determinar si resulta más conveniente
adquirir empleados, desarrollarlos o pedirlos prestados;
y 12 por ciento utiliza datos analíticos para corregir las
desigualdades y evitar que vuelvan a ocurrir.
Motivar la experiencia:
inspirar y estimular a las personas
rediseñando su experiencia
de trabajo. Aprovechar
la experiencia del empleado es
la máxima prioridad del área
de Recursos Humanos, y 58 por
ciento de las organizaciones se
está rediseñando para centrarse
más en las personas. Sin embargo,
solo 27 por ciento de los
ejecutivos cree que la experiencia
del empleado generará un
rendimiento para el negocio.