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Sacrificio y Violencia
“Solo después de perderlo todo somos capaces de cualquier cosa” (Tyler Durden)
Un viaje vertiginoso por los meandros del cerebro; conexiones nerviosas que se comunican entre sí por medio de descargas eléctricas; adrenalina que empieza a circular por la sangre; la respiración y el latido cardiaco aumentan; un folículo capilar secreta sudor; la cara de un hombre atemorizado con una pistola en la boca. Así empieza la película “Fight Club” de David Fincher y es claro al espectador, desde estas primeras escenas, que habrá violencia. Y de violencia está impregnada toda la película, una violencia sacrificial y purificadora, que permite a los personajes, víctimas o victimarios, de redimirse de alguna manera.
Según el diccionario etimológico la palabra sacrificio viene del latín sacrum facere “hacer algo sagrado mediante un acto o acción sagrada”, “ofrecer una cosa a Dios, haciéndola así sagrada, es decir, consagrándola”. Según la tradición judeo-cristiana, también tiene el sentido de sufrimiento o renuncia. A este significado se puede conectar otra palabra, mortificación, “matar”, “privar de vitalidad”. La palabra violencia viene del latín violentia “acción o efecto de aplicar medios violentos o brutales”. La palabra purificar viene de la raíz latina puro “sin elementos extraños, sin mezcla, homogéneo”, por ende purificar es “volver puro”.
Hay una línea sutil que une los conceptos de "violencia" y "sagrado", son casi inseparables, porque, como dice Girard (2012 y 1972), el sacrificio es el nudo central de lo sagrado, es su paradoja, porque la condición para que exista un sacrificio es la violencia criminal, donde existe un inocente que paga; y como dice Bataille “El principio del sacrificio es la destrucción, pero aunque llegue a veces a destruir enteramente (como en el holocausto), la destrucción que el sacrificio quiere operar no es el aniquilamiento. Es la cosa – solo la cosa – lo que el sacrificio quiere destruir en la víctima. El sacrificio destruye los lazos de subordinación reales de un objeto, arrebata la víctima del mundo de la utilidad y la devuelve al del capricho ininteligible.”
(Bataille G., Teoría de la religión, 1973, Editions Gallimard: Paris). Por tanto, el sacrificio y la violencia en la película “Fight Club” son elementos de redención para los protagonistas y para quienes interactúan con ellos.
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Sacrificio y Violencia
Edición especial: Horizonte Ético de la educación
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Editora: Tatiana Chiquito
Directoras: Tatiana Chiquito
y Mariana Mesa
Secretaria de redacción: Mariana Mesa
Diseño revista: Joomag.com
Producido para la clase Horizontes de Pensamiento
2016-1
Docente: Juan Guillermo Pérez Rojas
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