DERROTA MUNDIAL - EDICIÓN HOMENAJE AL AUTOR DERROTA MUNDIAL (Edición Homenaje) | Page 579

DERROTA MUNDIAL El general español Valentín González fue testigo de tres movimientos de "depuración" en masa, tanto en Ucrania como en Rusia Blanca. Las tropas rusas que durante la guerra franquearon la cortina de acero y contemplaron otro sistema de vida, por ese sólo hecho se hicieron sospechosas ante el Kremlin y con el pretexto de desmovilización se las llevó a campos de concentración. También a los prisioneros rusos repatriados se les llevó a campos de trabajo forzado, a fin de que no fueran a referir sus experiencias bajo un régimen distinto al marxista. El general González (antiguamente comunista) dice que el pueblo ruso como tal está desintegrado. "En Rusia sólo cuentan el Estado y el régimen... Unos calculaban en 1949 que el número de deportados ascendía a 10 millones; otros, que a 15... Yo calculo que hay 23 millones, de los cuales 19 son soviéticos y 4 son extranjeros". Para las nuevas generaciones hay otro sistema bolchevique de dominación menos violento y más eficaz. Consiste en la subyugación de la voluntad: se les toma desde la cuna, se les sigue en la escuela, en las diversiones, en las lecturas diarias, y no se les abandona ya jamás. Simultáneamente se les inculca odio fanático a todo lo que no sea marxismo, y en esta forma las nuevas generaciones se encuentran —sin saberlo— en una doble prisión física y mental. Quienes accidentalmente salieron de esa prisión como soldados cautivos de los alemanes afrontaron una vida dura de privaciones en las fábricas del Reich o en los campos de concentración; y sin embargo, aún resultó menos amarga que aquella que estaban habituados a sobrellevar. Al terminar las hostilidades hubo un alto porcentaje de pri- sioneros que se opusieron tenazmente a la "repatriación". En la zona ocupada por ingleses los prisioneros pidieron dramáticamente que mejor se les llevara a trabajar a Inglaterra, pero Roosevelt había prometido en Yalta que esos infelices serían entregados a la URSS y así lo hizo Truman. En muchos sitios fue necesaria la intervención de las tropas aliadas para hacer marchar a los cautivos rumbo a la "repatriación". El hecho de que medio millón de ex combatientes rusos se dispersaran por Europa y burlaran a sus perseguidores —a veces hasta negando la verdadera nacionalidad— es un síntoma de la repulsión que sentían de volver a ser súbditos del marxismo. Uno de esos cautivos que rehuyeron el regreso a la URSS, el capitán Konstantinov, insiste en que no debe identificarse al pueblo ruso con el régimen soviético. El ruso vive cautivo dentro de sus fronteras y no se le permite que viaje libremente por el extranjero. Cuando una delegación sale a tal o cual país, es objeto de vigilancia y su familia queda como rehén. Así lo vio también el general Richard Hilton durante los dos años que fue agregado militar inglés en Moscú. Dice que los visitantes de .la URSS se dividen en dos categorías: los que por sus tendencias izquierdistas son agasajados y cuidadosamente conducidos por determinados sitios agradables, y los que por necesidad del servicio tienen que desempeñar 579