DERROTA MUNDIAL - EDICIÓN HOMENAJE AL AUTOR DERROTA MUNDIAL (Edición Homenaje) | Page 554

Salvador Borrego A este respecto el escritor norteamericano Edgar Snow, decididamente prosoviético, da el siguiente testimonio: "Tuve oportunidad de conversar con muchos judíos rumanos. Si se los hubiera querido evitar, no habría sido posible; lo seguían a uno por las calles exponiéndoles sus temores y sus quejas, e indicándole la dirección de sus parientes de Norteamérica... Admitían que ya no se les perseguía, que no vivían más en el terror, que respiraban como hombres y mujeres libres, y que no se morían de hambre... Al principio uno se preguntaba cómo habían podido salvarse de la muerte tantos judíos, pero las averiguaciones no tardaban en revelar que el soborno, la corrupción y las infracciones administrativas habían alcanzado aun a los encargados de hacer cumplir las leyes antisemitas de Antonescu... El Gobierno de Antonescu les había confiscado todas las propiedades y las había ofrecido en venta a los rumanos que no eran de esa raza. Pero en la práctica, muchos de los compradores pedían prestado el dinero a los primitivos dueños, quienes continuaban ocupándolas a cambio de ciertos "dividendos" que pagaban a sus supuestos socios ruma- nos". 214 Antes de la guerra había 6 millones de judíos en toda Europa, y de haber sido asesinados seis millones, no habría quedado ni uno, lo cual es absolutamente falso. En todos los países las tropas aliadas encontraron numerosas colonias de israelitas y a otros muchos se les libertó de los campos de concentración. Aun antes de que terminara la con- tienda, a fines de 1944, Himmler accedió a que emigraran a través de Suiza 1,200 hebreos semanariamente, y el 19 de abril de 1945 (antes de que terminara la guerra) Norbert Masur, del Congreso Mundial Israelita, llegó a Berlín a gestionar ante Himmler que los judíos deténidos no fueran cambiados de campamento, a fin de evitarles posibles represalias durante su traslado. El cuento de los 6 millones de judíos muertos comenzó a ser fabricado por el israelita Polialcov, partiendo de las declaraciones del Dr. Wilhelm Hoettly y de Dieter von Wisliceny, quienes dieron informes sobre "evacuaciones", "emigraciones", "decrecimiento del judaísmo europeo", etc. Poliakov barajó estos términos y a todos les dio la acepción de "liquidación". Echó a rodar la bola y luego otros le fueron agregando dramáticos retoques. Los comisarios judíos soviéticos capturaron el campo de Auschwitz y hablaron de 4 millones de judíos muertos con gas, lo cual era falso porque meses antes la Cruz Roja internacional había visitado ese campo y no existía tal exterminio ni cámaras de gas. Pero el embuste fue difundido mundialmente por las agencias internacionales de prensa — controladas por el judaísmo— y coreado por películas filmadas, "documentales" amañadas, panfletos, libros, etc. David Rousset, en Francia, y Eugen Kogon, en Alemania dramatizaron la "liquidación" de los "6 millones". El comunista húngaro Nyizli Miklos inventó la "confesión" del Dr. Mengele, y despues de que fue ejecutado Rudolf Hoess 214 El ejemplo del poder SOVIÉTICO”.- Edgar Snow 554