De las ciudades redondas a los anillos espaciales | Page 40

De las ciudades redondas a los anillos espaciales Un tubo se situaría a una cierta distancia debajo de las ciudades y otro estaría encima de ellas. De este modo, las naves que se encontrasen en esos tubos ocuparían ór- bitas diferentes a las ciudades y, en consecuencia, ten- drían un desplazamiento con respecto a ellas, otros tubos comunicarían estos con la zona central ocupada por las ciudades, a su vez estas se recubrirían con una esfera her- mética que cerraría el circuito y así todas las zonas ha- bitables estarían protegidas y todos los gases de reacción serían recuperados, excepto los utilizados para la comu- nicación con el planeta. Para que los tubos puedan ocupar siempre su lu- gar en el espacio se utilizaría una especie de aletas que, con el viento solar, se acelerarían o frenarían a volun- tad. De este modo, las condiciones de vida en el espa- cio serían perfectas, no siendo necesario regresar al planeta más que por turismo o para conseguir recursos minerales. Los viajes de turismo a la superficie solo se realizarían con carácter excepcional debido a su alto coste. Desde el exterior estas esferas que recubrirían las ciudades o los tubos que las unirían, tendrían un as- pecto transparente, aunque pudiera ser un efecto artifi- cial, y estarían construidos en materiales sólidos de va- rios metros de espesor para resistir las radiaciones cós- micas y los meteoritos. Entre las ciudades del anillo se instalarían las bases de lanzamiento de naves al planeta o al exterior, las es- taciones de energía solar, las encargadas de recoger el viento solar para la masa de reacción de las naves y los alerones responsables de mantener los anillos en su zona 40