RECETAS DE VIDA
para pacientes de cancer de seno
Optimice sus alimentos
Hay algunas sugerencias que le pueden ayudar a optimizar el consumo de los alimentos sugeridos dentro de una dieta saludable:
Consuma comidas que no contengan solo carne. Busque recetas que incluyan vegetales, pasta integral o legumbres como alimento principal de su plato. Esto debe hacerlo varias veces a la semana
Explore variedad de granos enteros. Pruebe recetas y productos que incluyan granos enteros como cebada, avena, trigo integral y arroz silvestre. Disfrute el pan integral y cereales integrales como la avena y el salvado.
Sirva frutas en cada comida. Puede consumirlas como postre o en recetas. “Estudios indican que el consumo de por lo menos cinco porciones de frutas y vegetales al día podría reducir la incidencia de cáncer en un 20 por ciento”, dice Jurado.
Prefiera los alimentos menos procesados. Comidaq que esté fresca y ojalá sea de temporada, para optimizar nutrientes saludables y antioxidantes.
Optimice la grasa que consume. Para reducir la cantidad de grasa que consume, use aceites de oliva o canola en sus platos. La margarina proveniente de estas fuentes también es aceptable.
Limite las grasas. Disminuya a un 25 a 35 por ciento del total de calorías consumidas. “Por ejemplo, limite la cantidad de grasa a no más de 500 a 700 calorías en una dieta de 2.000 calorías. Escoja productos lácteos bajos o sin grasa.
Controle las porciones. Para mantener un peso saludable, controle las porciones de alimentos que consume. Cualquier exceso resultará en ganancia de peso.
Aprenda a leer la información nutricional. La información nutricional de los productos que consume le sirve para planificar sus comidas.
Realice ejercicio. “Estudios han demostrado que mujeres que son activas regularmente tienen un 30% menos de probabilidad de desarrollar cáncer de mama que las mujeres que son inactivas”, explica Jurado.
Los sobrevivientes de cáncer deben recordar:
Comer más alimentos procedentes de plantas.
Consumir al menos cinco porciones diarias de frutas y vegetales.
Tomar alcohol con moderación.
Limitar el consumo de azúcares y refrescos.
Escoger alimentos bajos en grasa.
Disminuir las porciones de alimentos; no comer en exceso.
Incluir la actividad física en su vida diaria.