Estando en estas disquisiciones , oímos un grito , “ Free Palestine ”, y vimos entrar por la puerta , proyectada seguramente por el mismo que había proferido la voz , una botella con un trapo encendido , que , al romperse , causó una gran llamarada y mucho humo en el local . Pudimos sofocar el conato de incendio echando encima del fuego el anorak de Malik y una manta que tenía allí para ponérsela encima de las rodillas en las mañanas con hielo . Yo hice amago de quitarme mi chamarra , pero me detuvo el amor propio , el echar a perder una prenda que tendría que sustituir por otra , con el consiguiente quebranto de mi bolsillo .
— Al final , vas a tener que irte — le dije . — Yo hablar primero con todos .
— Sí ; como no les ofrezcas socializar los beneficios y privatizar las pérdidas , vas apañado . Quieren tu ruina , como desean el aniquilamiento de Israel , por más que conseguirlo obraría en detrimento suyo .
José María Izarra C .
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