Cuentos de los Herm anos Grimm
EDITORIAL DIG ITAL - IMPRENTA NAC IONAL
costa rica
-He cometido un grave error y no valgo nada para ser tu esposa.
Pero él respondió:
-Confórtate, los días terribles ya pasaron, ahora celebremos nuestra boda.
Entonces llegaron cortesanas y la vistieron con los más espléndidos vestidos y su padre y la corte
entera llegó, y le desearon a ella la mayor felicidad en su matrimonio con el rey Pico de Tordo. Y
que la dicha vaya en crecimiento. Son mis deseos, pues yo también estuve allí.
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