Cuadernos Médicos Sociales 2018; Vol 58 N°3 | Page 122

Valparaíso? En primer lugar destacar que nuestro proyecto se basa en una concepción de salud colectiva que entiende el impacto de los determinantes sociales y la inequidad en salud de la población, que se inspira en una ética comunitarista y lo moviliza una visión económica cooperativista y solidaria. Contempla e incorpora la innovación intentando poner en común el bienestar y la producción de salud. Se basa en una noción salutogénica y no patogénica poniendo en el centro el ejercicio de deberes y derechos de los ciudadanos a la salud y a los CESFAM como agentes productores de salud, y no como meros administradores de la morbilidad. Desde el punto de vista operativo, el Proyecto se traduce en gran medida en nuestro plan de sa- lud 2018-2020, con el propósito de contribuir a mejorar las condiciones de vida y bienestar social de los habitantes de Valparaíso, a través de la en- trega de cuidados integrales de calidad y la partici- pación de la ciudadanía en la producción de salud. Del plan podemos destacar al menos 4 grandes ámbitos de intervención. En lo relativo a la gestión técnica nos propu- simos el desarrollo de estrategias innovadoras y transversales para abordar la salud en adolescen- tes, jóvenes y adultos mayores; el refuerzo del tra- bajo a nivel de salud familiar y la incorporación de sistemas de gestión en cada uno de los CESFAM. Todo ello orientado al impacto epidemiológico y no sólo al logro de las metas, bajo una metodolo- gía de mejora continua. Énfasis del uso de opor- tunidades para brindar mayor resolutividad en la demanda clásica de atención de salud, repensando los modelos de servicios para mayor cobertura. En materia de desarrollo económico nos pro- pusimos el desarrollo de iniciativas económicas cogestionadas con la ciudadanía a través de la creación de una red de farmacias populares, óp- ticas populares, sillones dentales, podología y un laboratorio municipal. Esperando contribuir a la disminución del gasto de bolsillo en salud, sobre todo en adultos mayores. En materia de participación en salud nos plan- teamos como desafío el diseño de una estrate- gia basada en el principio de la cogestión o co- rresponsabilidad en la producción de salud. En cuanto a promoción de la salud nos proponemos avanzar en materia de alimentación saludable y actividad física intentando avanzar no sólo en las conductas individuales sino en los factores del en- torno, siendo la educación y formación de agentes comunitarios una de las principales apuestas. comunitario, vinculando los procesos de aprendi- zaje con las necesidades del barrio y los procesos de desarrollo de las comunidades que los habitan. A nivel de investigación el observatorio per- mitía conocer directamente de los determinantes sociales de cada barrio y de los procesos de in- tervención diseñados entre los vecinos y los estu- diantes, permitiendo una relación cercana desde el primer año hasta los procesos de práctica pro- fesional. Esto ayudó mucho a las direcciones de salud y DIDECO de los municipios para poder mejorar sus políticas y en particular las de promo- ción y participación 3. Visto en perspectiva y ahora como director de salud de la alcaldía ciudadana de Valparaíso, ¿qué elementos te han sido de uti- lidad para vuestro proyecto de salud? En primer lugar me permitió comprender el lu- gar estratégico que cumplen los gobiernos locales y los barrios en la producción de salud y obvia- mente por mi experiencia académica el enorme potencial que cumplen las universidades tanto en lo formativo con en la vinculación con el medio social y no sólo laboral basado sólo en la lógica de campos clínicos. En este sentido para dirección del área de salud el saber de las universidades, el de las comunidades y del gobierno local pasan a constituir una inteligencia colectiva necesaria para producir una nueva ciudad para los porteños, es decir para producir bienestar a través de la salud. Lo anterior se ha traducido de manera practica en nuestro proceso de planificación que consideró el levantamiento de información entre estudiantes y vecinos en los territorios de Valparaíso en ma- teria de salud, en la implementación de procesos formativos y de intervención en población adulto mayor, en la incorporación de tecnologías en los procesos de gestión asistencial, así como en la ne- cesaria reflexión del quehacer en salud. Desde el punto de vista metodológico rescato de la propuesta que diseñamos del programa de intervención comunitaria muchos aspectos que permiten realizar procesos sinérgicos entre las ne- cesidades de las comunidades y las posibilidades de concretarlas sin reproducir lógicas clientelares o sobre burocratizadas. Finalmente el aporte de los estudiantes que constituyen un aliado histórico en los procesos de cambio y que en este caso nos permiten es- tablecer una comunión entre el aprendizaje y la sociopraxis que impulsamos localmente en los proyectos de salud barrial. 4. Qué aspectos relevas como los más importantes del proyecto de salud de Infante A., et al. 120