La Naturaleza En Peligro
Impacto Ambiental
Darwin Núñez
Desde una visión al pasado el hombre sobrevivió, aprendió, se reprodujo y
evoluciono, a lo que hoy determinamos como hombre moderno durante 2500000
años en un íntimo contacto con la naturaleza. Una convivencia inseparable e
insoluta, permanente en cada aspecto de la vida del hombre primitivo, el entorno
lo condiciono a aprender a sobrevivir o perecer y
con él, la especie humana.
Podemos imaginar esta etapa de la existencia del
hombre o bien como una escena cinematográfica
de caos y fuego donde la vida era poca más que
efímera o una vida dura, con peligros, pero con una
tranquilidad mínima para garantizar la reproducción
de la especie, aprender de lo que los rodeaba y
transmitirlos a las generaciones siguientes.
La ambición de controlar la vida humana desde la concepción a la muerte es la
máxima expresión del imperialismo integral, tal como hoy se manifiesta. Como
vamos a ver, este imperialismo es meta político, ya que procede de una
concepción particular del hombre. Las expresiones políticas y no políticas de este
imperialismo no son más que las consecuencias
perceptibles de esta antropología.
Esto nos va a llevar a aclarar la dimensión totalitaria
de este imperialismo, cuyos efectos todavía no se
han mostrado en su totalidad. El debate en la
comunidad científica sobre esta cuestión se
produce a veces sólo de forma tácita, pero
evidentemente existe.
Al principio, divulgar se veía de una forma más bien peyorativa. E, incluso, los que
nos dedicábamos a ello lo hacíamos con cierta sensación de culpa. La percepción
ha ido cambiando y la divulgación está siendo cada vez más estimada.
En parte por algo que creo que existe ya en todo el mundo: el convencimiento de
que resulta muy importante que la conciencia de estos asuntos esté presente en
los medios y la necesidad también de ‘vender’ la ciencia como un producto más.