uando piensas en fortaleza o
resistencia ¿qué imagen te viene a la mente? ¿Una montaña, un hombre musculoso, un superhéroe, algo que no se puede romper? Puede ser. Sin embargo, este término tiene más de fondo que de forma.
Hace un par de días me topé con una historia que me hizo reflexionar sobre lo que soy, sobre lo que tengo y aprender a valorar las cosas grandes y pequeñas que me ha dado la vida. Era la historia de un muchacho nicaragüense. Un niño que nació en el seno de una familia humilde y sencilla. Pero eso no es lo más importante; este niño nació sin brazos. Así creció, probablemente juzgado y dando lástima a la gente que conocía por el camino. Y pensaba para mis adentros, si uno se pone a mirar la historia de esas personas, son las personas con más “pantalones” -por no decir otra cosa- que uno pueda conocer.
Tres palabras: fuerza de voluntad
Aunque carecen de miembros u órganos, desarrollan otras habilidades que lo dejan a uno boquiabierto. Me imagino a ese niño nicaragüense compartiendo con sus amiguitos, seguramente, no pudiendo hacer muchas actividades que los otros sí. Pensaba ¿y las niñas? Seguramente le gustaba alguien. ¿Le habrá podido robar un beso a una niña? Quién sabe. Lo que me impresiona de esta historia es que el niño se aferró a la vida y superó todos los obstáculos que se le presentaron. Tuvo que aprender a hacer las cosas y a escribir con la boca y los pies. Tuvo que acondicionar un coche para poder conducirlo. Tuvo que continuar viviendo con sus limitaciones.
Es más, se convirtió en uno de los guitarristas más talentosos del mundo.
Así es, resulta que este muchacho toca la guitarra con los pies. Se convirtió en el famoso Tony Meléndez. Entonces, ¿qué tienen esas personas con alguna discapacidad que logran hacer cosas
C
FORTALEZA
33
Tomado de: https://goo.gl/c3Gu2D